¿Quién es César Chávez?

Curtido en la frontera y apadrinado con el nombre de su abuelo –quien llegó a los Estados Unidos en el siglo 19– César Estrada Chávez nació en Yuma, Arizona, el 31 de marzo de 1927. 

Humilde desde la cuna, la familia de César vivió tiempos muy difíciles, ya que fueron despojados de las tierras que tenían en Arizona. Hecho con el que se forjó e inició el carácter de un niño que a los 10 años ya conocía la injusticia social en carne propia.

Curtido en la frontera y apadrinado con el nombre de su abuelo –quien llegó a los Estados Unidos en el siglo 19– César Estrada Chávez nació en Yuma, Arizona, el 31 de marzo de 1927. 

Humilde desde la cuna, la familia de César vivió tiempos muy difíciles, ya que fueron despojados de las tierras que tenían en Arizona. Hecho con el que se forjó e inició el carácter de un niño que a los 10 años ya conocía la injusticia social en carne propia.

Nómadas sin rumbo, la familia Chávez deambuló entre California y Arizona durante varios años. Cuando llegaba a estar en alguna escuela, César sufría de discriminación racial siendo golpeado con una regla cada que hablaba español en clase, debido a que solo se les permitía hablar en inglés.

Cuando su padre, Librado Chávez, tuvo un accidente, César trabajó como campesino para ayudar a su familia, ahí en la siembra vivió la explotación del migrante y la desesperación de los braseros por alcanzar un falso sueño americano. 

Este suceso marcó al joven Chávez para levantar su lucha y alzar la voz por una mejor calidad de vida y por la dignificación de su trabajo.

César se unió a la armada naval estadounidense en 1946, y sirvió durante dos años en la Segunda Guerra Mundial, al volver se casó con Helena Fabela, quien se convirtió en una compañera incondicional en su labor como activista. Fruto de ese matrimonio nacieron ocho hijos.

Junto a Fred Ross trabajó en la “Community Service Organization” durante 10 años, logrando como uno de los principales cambios, el voto electoral del latinoamericano en el estado de California. Su salario era de 35 dólares a la semana.

En 1962 decidió tomar su propio camino y en Delano, California, fundó la United Farm Workers (UFW), para apoyar a los campesinos mejorar sus condiciones laborales creando un sindicato. 

Y al no poder lograr las demandas que se querían obtener de los codiciosos dueños de las plantaciones de uvas, se levantaron en huelga en 1965.

Chávez siempre pugnó por la manifestación a la no violencia, siendo su movimiento pacifista, teniendo como objetivos la lucha por un trato justo, un pago digno y sacar de la miseria a miles de trabajadores en el campo. 

César unió esfuerzos con migrantes filipinos para las manifestaciones en las que eran amedrentados por autoridades estadounidenses e inclusive golpeados.

Uno de los mayores logros durante estos sucesos fue captar la atención del senador Robert Kennedy, quién abogó por Chávez y la causa –manera de llamar al sindicato y el movimiento social de lucha–. 

Y en El Malcriado, gaceta informal de esta unión, se expresaba el descontento generalizado de los obreros migrantes en el sindicato.

Otro momento clave en la lucha de César Chávez por alcanzar la justicia social fue en 1966, cuando realizó una caminata de Delano a Sacramento California, esto con motivo para obtener el apoyo del gobernador del estado en ese momento, Edmund “Pat” Brown. 

A lo largo del peregrinaje se le unieron cientos de trabajadores y fue tal el llamado de atención que los vinicultores accedieron a firmar el contrato sindical, este fue el primer logro de muchos a lo largo de la vida de Chávez.

Los ayunos fueron otra estrategia que Chávez utilizó para acaparar la atención mediática. El luchador social explicaba que más que un sacrificio, esto era algo “tan espiritual como político”. En 1968 mantuvo un ayuno durante 25 días, el cual proponía la abstención a la violencia, ya que en la UFW empezó a haber focos rojos de desesperación que pugnaban por marcar represalias en respuesta al maltrato que vivían en las manifestaciones.

Continuó su lucha hasta el fin de su vida en 1993, a los 66 años de edad. A su funeral asistieron más de 30 mil personas. Su legado vive hasta ahora.

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