En una entrevista para Esquire Reino Unido, Eggers reveló que existe una versión extendida de tres horas, la cual probablemente será incluida en el lanzamiento en formato Blu-ray.
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“Nosferatu”, el rostro ‘del sacrificio y una sexualidad muy salvaje’ que ya es todo un éxito en México

Con un enfoque en la sexualidad femenina, las tensiones de género y el uso de efectos prácticos, la película ha generado críticas divididas, pero también se ha vuelto un éxito taquillero en México

La sombra ha sido desde siempre un símbolo de lo desconocido, lo oculto y lo temido. En la historia del cine, pocas figuras han encarnado este concepto como el conde Nosferatu, una de las representaciones más inquietantes del mal. Su presencia atraviesa generaciones y  evoluciona junto con los miedos de cada época, desde el clásico expresionista de F.W. Murnau en 1922, pasando por la interpretación de Werner Herzog en 1979, hasta la visión contemporánea de Robert Eggers en 2024.

Esta nueva adaptación está generado opiniones encontradas, divididas entre la fascinación por su respeto a los orígenes y las críticas hacia las decisiones narrativas. Para Edna Campos, directora del festival de cine de terror Macabro, estas divisiones son un reflejo del peso cultural que conlleva abordar una obra maestra.

“El Nosferatu original es una joya de la cinematografía, una obra maestra que estableció las bases de lo que hoy entendemos como terror. Revisitarlo requiere valentía y un enorme respeto por su legado. Eggers lo hace, pero siempre habrá quien no esté de acuerdo, porque cada generación lee al conde desde su propio miedo y tiempo”, comenta Campos a Reporte Índigo.

Lo bueno y lo malo de Nosferatu

Desde que se anunció en 2015 de que Robert Eggers se haría cargo de esta reinterpretación, las expectativas fueron tan altas como la presión por estar a la altura.

“Cuando dijeron que Eggers dirigiría, hubo un entusiasmo inmediato. Muchos pensamos: ‘Sí, quiero ver su versión de Nosferatu’. Pero también nos preguntábamos si realmente podría aportar algo nuevo. Y ese es el desafío de los clásicos: son eternos, como los vampiros, pero eso también conlleva mucha responsabilidad y habilidad”, reflexiona Campos.

Eggers, conocido por películas como The Witch y The Lighthouse, ha demostrado una afinidad por capturar atmósferas densas y sombrías, lo que le ha permitido rendir un homenaje al expresionismo alemán que definió al original de 1922.

“Creo que lo más valioso es cómo respeta la estética de esa época. Las sombras, los encuadres, la tensión visual, todo nos transporta a un cine que marcó un antes y un después”, señala Campos sobre la fotografía que estuvo a cargo de Jardin Blaschke.

La crítica y maestra en Artes Narce Ruiz opina que Eggers mantiene la esencia de su estilo visual, al tiempo que se inspira en las versiones previas de Nosferatu, desde la clásica de 1922 hasta la de Herzog (1979).

Nosferatu 2024 está como en medio, bebiendo de ambas películas, pero imprimiendo su estilo personal. Creo que eso es muy espectacular. No es una película completamente en blanco y negro, pero sí parece que tiene el espíritu del gran contraste, y cuando usa los tintes de rojo, el fuego y la pasión juegan un papel muy importante”, comenta Narce a Reporte Índigo.

Ruiz, además, aprecia cómo Eggers emplea la sombra para dar cuerpo a las amenazas de la película. Cita una escena en la que la figura de la protagonista es acosada por una mano que aparece como una sombra inquietante.

“La presencia de la sombra es crucial en la creación de la tensión, el miedo a lo que está por venir y la curiosidad por el rostro del monstruo que se mantiene oculto, casi hasta la mitad de la película”, agrega la también doctora en Industrias Culturales.

¿Cómo afecta el uso de la IA en Nosferatu?

Si bien esta nueva versión tiene méritos innegables, Edna Campos también señala aspectos que podrían dividir opiniones, como el desarrollo mismo de la historia.

“Hay escenas que son hermosas, casi como cuadros vivos, pero sentí que en algunos momentos la narrativa corría demasiado rápido. Es como si quisiera llegar rápido a ciertos puntos clave y, en ese trayecto, perdiera un poco de profundidad”, dice.

Por otro lado, Narce pone sobre la mesa el retorno a los efectos prácticos en lugar de depender exclusivamente de los efectos visuales generados por computadora. Tal como se vio en cintas como Wicked.

“Estamos en una época saturada de películas que abusan de la inteligencia artificial y los efectos digitales, pero esos efectos envejecen muy rápido. Si miras El Señor de los Anillos hoy, algunos de sus efectos visuales ya resultan risibles tras solo 20 años.

“En esta nueva versión de Nosferatu podemos observar una tendencia en Hollywood hacia el uso de efectos prácticos. Hay películas que están regresando a lo auténtico, a lo que se crea directamente en el set. Por ejemplo, en lugar de generar ratas por computadora, se trabajó con cerca de cinco mil ratas reales. Eso le da una autenticidad que se agradece. Lo que vemos en pantalla es lo que realmente sucedió en el set, y esa honestidad se percibe en el resultado final”, señala.

Las cifras

La película de Robert Eggers ha superado los 100 millones de dólares en taquilla mundial, según Variety. Con 69.4 millones recaudados en Estados Unidos y 30.9 millones en el extranjero, este filme gótico tuvo un presupuesto de 50 millones.

En México, durante la semana del 6 al 12 de enero, recaudó 49.7 millones de pesos, lo que eleva su acumulado a 121.2 millones de pesos desde su lanzamiento. En cuanto a asistencia, 650.2 mil personas acudieron a las salas esta semana, alcanzando un total de 1.4 millones de asistentes.

 La fascinación por Drácula y Nosferatu

El cine de terror parece revitalizarse con cada generación, impulsado por reinterpretaciones de figuras clásicas y la nostalgia que evocan en el público. Ejemplo de ello son proyectos recientes como Renfield, así como las próximas adaptaciones de Frankenstein y otras historias del horror clásico. Sin embargo, ¿este resurgimiento es una oportunidad para la innovación narrativa o un terreno fértil para “refritos”?

“La audiencia responde con entusiasmo a estas figuras atemporales. Nosferatu, por ejemplo, demuestra que el legado de Drácula sigue vigente, pero también queda la sensación de que estamos dejando de lado historias originales. Creo que el público está hambriento de narrativas que exploren los miedos y obsesiones actuales”, comenta la maestra en Artes.

El mito de Drácula y Nosferatu ha sido revisitado innumerables veces, ocupando espacios distintos en la narrativa visual. Drácula, el seductor aristocrático, representa el atractivo misticismo de la inmortalidad, mientras que Nosferatu, interpretado por Bill Skarsgård, en su forma primitiva y grotesca, encarna el terror asociado con la peste y la muerte.

Ruiz destaca cómo estas figuras han trascendido generaciones, convirtiéndose en símbolos atemporales que conectan con los temores humanos más profundos.

“Drácula, con su misticismo de inmortalidad y seducción, siempre será atractivo. Nosferatu, por otro lado, nos enfrenta a lo repulsivo, a la figura de la peste y la decadencia. Ambos son una misma esencia, pero en extremos opuestos del espectro del miedo, señala Narce Ruiz.

Edna Campos coincide en este punto de rescatar la fiereza original del Nosferatu frente al actual universo que se ha difundido sobre la representación de Drácula.

“Creo que esta figura del vampiro ha recuperado algo de la fiereza perdida. Aunque se ha hablado mucho de su apariencia, especialmente del detalle del bigote, que ha inspirado bromas y memes, siento que va más allá de su aspecto físico. Puede que no se parezca mucho al original, pero sí conecta con su esencia: esa encarnación de la maldad pura.

“Este vampiro es malo, cruel e incluso violento, características que algunos consideran exageradas, alejándose de la imagen romántica que suele asociarse con los vampiros. Aquí, creo que es una historia de sacrificio, no tanto de amor, y  una sexualidad muy salvaje”, abunda.

La sexualidad femenina en Nosferatu

Robert Eggers redefine el mito de Nosferatu en su nueva adaptación al ofrecer un retrato más visceral y complejo de la época victoriana. Desde desnudos frontales hasta la representación explícita de la sexualidad femenina, la película explora temas como las enfermedades mentales y el deseo reprimido desde una óptica del siglo XXI.

“También refleja las tensiones de género de aquel entonces, donde la represión del deseo femenino estaba profundamente arraigada. El personaje de Ellen, interpretado por Lily-Rose Depp, representa esta lucha contra las normas opresivas. Lejos de ser una víctima pasiva, ella se convierte en el centro de la narrativa, enfrentando tanto sus propios deseos. 

“Hay un momento en que, tras ser atada por tener alucinaciones, se enfrenta a su esposo Thomas Hutter (Nicholas Hoult) y al amigo de él, Friedrich Harding (Aaron Taylor-Johnson) con su rol como aristócrata, protector y jefe de familia. Es un choque claro entre la rebeldía femenina y el peso de las estructuras patriarcales. Incluso la concepción de la menstruación, asociada históricamente con lo impuro y lo descontrolado, aparece como símbolo de esta opresión”, apunta Campos.

A pesar de críticas mixtas, la película ha sido un éxito en taquilla, superando los 100 millones de dólares a nivel mundial. En México, debutó en tercer lugar durante su primera semana, duplicando su inversión inicial en poco tiempo. Este éxito, según Ruiz, podría abrir la puerta a una nueva ola de películas basadas en figuras clásicas del horror, tal y como ha pasado en otras ocasiones como con el hombre lobo.

Sin embargo, advierte que aunque estas readaptaciones funcionan bien comercialmente, el público está ávido de historias originales que hablen de los miedos y obsesiones actuales.

“Son personajes que, por ser tan atemporales, siempre estarán presentes en el cine, pero es importante equilibrar estos rescates con historias nuevas”, concluye Ruiz.

Datos sobre la producción

  • Eggers intentó desarrollar este proyecto desde 2015, pero solo logró concretarlo tras el éxito de El faro.
  • Las pinturas de Caspar David Friedrich y las obras de teatro gótico del siglo XIX sirvieron como referencia visual.
  • Las filmaciones se realizaron en castillos y aldeas de Europa del Este, en un intento por capturar la atmósfera de la Europa medieval.

Toma nota

  • Fecha de estreno en México: 1 de enero de 2025
  • Dirección y guión: Robert Eggers
  • Basada en Nosferatu (1922), de Henrik Galeen, y Drácula, escrita por Bram Stoker
  • Producida por Robert Eggers, Chris Columbus, Eleanor Columbus, Jeff Robinov y John Graham
  • Reparto: Bill Skarsgård, Lily-Rose Depp, Nicholas Hoult, Aaron Taylor-Johnson, Emma Corrin, Willem Dafoe, Ralph Ineson y Simon McBurney
  • Director de fotografía: Jarin Blaschke
  • Compositor: Robin Carolan
  • Distribuidores: Focus Features y Universal Pictures