El desinterés de la 4T y AMLO por la cultura y la ciencia
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que el fomento a la lectura, la ética y el apoyo a las comunidades indígenas son parte esencial de su gobierno; sin embargo, especialistas concuerdan en que estos temas deberían ser más puntualizados y atendidos, ya que no se les ha dado la importancia necesaria
Fernanda MuñozLas decisiones que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha tomado en el sector cultural y la ciencia han sido criticadas desde sus inicios, ya que para sus integrantes, son muestra del poco interés de la llamada Cuarta transformación (4T).
La disminución de su presupuesto, la posible desaparición del FONCA y los despidos injustificados, son algunas de las polémicas que se han suscitado; ahora, que el jefe de Estado le dio unos minutos a este sector en la presentación de su Primer Informe de Gobierno, vuelve a levantar críticas
Durante su presentación, el mandatario destacó el impulso que se le ha dado al fomento a la lectura, la importancia que ha tenido el Fondo de Cultura Económica (FCE), el éxito del Centro Cultural Los Pinos y aseguró que su gobierno apoyará a las comunidades indígenas, incluso, más que al resto de los mexicanos.
Sin embargo, dichas actividades distan mucho de las promesas que este gobierno le había hecho a este sector. Alejandra Frausto, secretaria de Cultura federal, aseguró cuando tomó posesión de su cargo que la cultura nunca más volvería a ser accesorio ni un adorno, sino que estaría en el centro y sería uno de los ejes de la política de regeneración del tejido social y del bienestar del alma, pero la realidad es otra.
La otra cara de la moneda
De acuerdo con el Módulo sobre Lectura (MOLEC), en su registro de abril de este año, esta actividad disminuyó en comparación con 2015; de cada 100 personas de 18 y más años, 42 leyeron al menos un libro.
Hace cuatro años, la proporción fue de 50 por cada 100. Aunque el presidente recalcó en enero que lanzaría la Estrategia Nacional de Lectura para potencializar dicha actividad en la sociedad mexicana, las acciones emitidas al parecer no están funcionando.
Yuritzia Navarrete Ávila, jefa del Departamento de Actividades culturales de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatlán, considera que el fomento a la lectura debe ser una actividad impulsada por todas las instituciones educativas y culturales del país y no sólo por unas cuantas, ya que la atención a este tema es primordial.
La importancia que ha tenido el Fondo de Cultura Económica (FCE) en el país, según AMLO, es por disminuir el precio de la mayoría de sus publicaciones para fomentar la lectura y haber impreso la Cartilla Moral, de Alfonso Reyes.
La administración actual debe actuar para que la gente lea más, no solamente que baje los costos de los libros, sino tiene que hacer un plan nacional en el que los chicos lean por gusto, no por obligación
Sobre la Cartilla Moral, el doctor en Pedagogía por la UNAM, Martín Manjarrez Betancourt, opina que aunque es muy loable, no basta con brindarle este libro a los menores para que sean buenos ciudadanos, sino que se les debe enseñar desde las aulas y los hogares los valores que deben implementar.
Otro tema que el mandatario consideró importante de recalcar en su síntesis, fue el éxito que la residencia de Los Pinos ha tenido desde que ordenó que se convirtiera en un Complejo Cultural.
Este espacio, a cargo de la Secretaría de Cultura federal, presentó 335 actividades artísticas en las disciplinas de música, cine, danza, artes plásticas y teatro entre diciembre de 2018 y junio de este año, con una asistencia de un millón 600 mil personas.
Navarrete Ávila señala que esto sería el mayor logro hasta ahora, porque es una manera de generar arraigo, pues “por mucho tiempo ese recinto fue privado y ahora que se da esta apertura tiene un boom, que no es malo; sin embargo, hay otros sitios donde se fomenta la cultura y que eran importantes de mencionar”.
Aunque López Obrador anunció la creación del Centro Cultural Chapultepec, asegurando que sería un espacio artístico de 800 hectáreas y uno de los sitios más importantes del mundo, Navarrete Ávila dice que el gobierno obradorista no debería presumir esta construcción, sino esperar a que sea la propia sociedad la que lo juzgue.
Sobre el apoyo a los pueblos originarios, Obrador dijo que de cada 10 hogares de comunidades indígenas que hay en el país, nueve están recibiendo apoyos económicos por parte de la nueva administración. Se espera que el total de dicha población obtengan el 100 por ciento del auxilio gubernamental a finales de este año.
“No sólo es necesario darle voz a estas comunidades, sino que también hay que promover su cultura, todo este arte que crean con sus propias manos y que en ocasiones menospreciamos”, afirma Martín Manjarrez Betancourt.
Los ojos en la Ciencia
Aunque el jefe de Estado comentó de manera mínima los avances en materia tecnológica y científica en Palacio Nacional, estos tópicos abarcaron una buena parte del Primer Informe Gubernamental, donde se especificó que el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) se ha planteado, junto a la llamada Cuarta transformación, un cambio profundo en el quehacer fundamental como impulsor de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación en México.
López Obrador destacó una de las labores realizadas por el Conacyt en los últimos meses: la incorporación de becas de posgrado a nueve mil estudiantes adicionales a los que ya recibían ese apoyo.
La importancia que el actual gobierno le dio a dicha institución se dio luego de destacar que ésta sería la única que asesoraría al presidente en los temas de Ciencia y Tecnología, dejando de lado, incluso en el Informe, al Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCyT).
Especialistas de diferentes instituciones científicas recalcaron que la Ciencia no tendrá el mismo valor para el desarrollo del país si el ejecutivo recibe la opinión de sólo una institución.
De acuerdo con Manjarrez Betancourt, la presidencia de México no debe enfocarse sólo en un par de temas, como con la seguridad y la violencia, sino que también debe mirar a la Cultura, ya que, según comenta, potencializando este campo es que se puede llegar a erradicar las faltas de derechos humanos.
“No por atender a uno desatendamos a otros, se tienen que trabajar en un enfoque completo todos los temas pertinentes para la sociedad, eso debe pensar el presidente en los Informes que restan”, detalla Manjarrez Betancourt.
