Crass, el colectivo pacifista que experimentó con el Punk

Los jóvenes, idealistas y activistas, declararon en 1979 que el punk había muerto y crearon un sonido totalmente ecléctico en el que el discurso político nunca dejó de estar presente

A finales de los setentas, en plena decadencia del efímero pero complejo movimiento punk y el inicio de la efervescencia post punk, un grupo de jóvenes decidieron unirse, más como un colectivo que como un grupo, y conformar un proyecto anarquista-pacifista en el que la música fuera sólo un instrumento para pasar del arte a la acción directa… El resultado fue Crass.

Rompiendo con los estereotipos marcados por los ‘padres’ del punk a los que poco les importaba la ideología política o el activismo directo, Crass conformó una comuna anarquista en donde lo más importante era realizar acciones pacíficas y en la cual retomaron varios elementos de sus antepasados inmediatos, los hippies, como el veganismo, cuidado a la naturaleza y la producción propia de lo que consumían.

En el plano musical, ellos mismos producían lo que después presentaban al público: un collage sonoro lleno de silencios, voces femeninas y masculinas perturbadoras que promovían el feminismo, anarquismo, pero también el pacifismo; además de una experimentación creativa que dio como resultado sonidos eclécticos en los que muchas veces algún sintetizador se hacía presente, cuestión impensable en la época dura del punk.

Aunque provenían de una comuna, la banda, que nació en 1977 en Epping, Essex, Inglaterra, destacaba de las demás por los uniformes militares negros que utilizaban en el escenario y a donde quiera que fueran y su logo, que era una mezcla de iconos de autoridad como la cruz cristiana, la esvástica y la bandera de Reino Unido, lo que los llevó a ser considerados por algunas personas como fascistas.

Sin embargo, sus letras distan mucho del fascismo y en ellas los jóvenes critican tanto a la monarquía, la sociedad londinense y su cultura del consumo, como a la religión y la actitud pasiva de la población en torno a temas políticos que en esa época comenzaban a despegar como el feminismo y la protección de cualquier ser vivo… Crass fue una banda adelantada a su época.

El cuasi mítico colectivo punk pacifista fue fundado por Penny Rimbaud y Steve Ignorant, como un dúo de voz y batería (llamado Stormtrooper) que después atraería a sus filas a Joy De Vivre, Pete Wright, N.A. Palmer, Steve Herman, Eve Libertine y Phil Free (quien sustituyó en la guitarra a Steve) para tocar en diversos pubs a los que no asistía mucha gente y en los que las broncas se hacían presentes.

En una actuación que tenían programada en el Roxy Club, los miembros de la ya entonces no bautizada banda Crass (nombre alusivo a una estrofa de la canción de David Bowie, “Ziggy Stardust”) llegaron completamente ebrios y fueron bajados por la concurrencia del escenario. De esa experiencia nació la canción “Banned from the Roxy”, de corta duración como casi todos sus temas.

Tras penosas presentaciones, el colectivo decidió profesionalizarse y dejar el alcohol y la marihuana para después de los conciertos, con lo que lograron crear todo un performance en el escenario que atrajo a mucho más fans: iluminaban con focos de no más de 100 voltios, además de que proyectaban videos o películas de fondo y algunos collages visuales realizados por Mick Duffield y Gee Vaucher.

ACCIÓN DIRECTA

El proyecto Crass no se puede entender sin el contexto de lo que pasaba a su alrededor durante finales de los setenta e inicios de los ochentas en Reino Unido: una nación en franca decadencia, un estado represor de las expresiones juveniles y de las huelgas laborales (como la minera), la Guerra de las Malvinas y el fin de la idea de que un mundo mejor era posible, que en los sesentas retumbaba en los oídos de los jóvenes.

Adelantados a su época, hoy ningún grupo musical de punk ha podido emular acciones similares a las que Crass realizó, aunque los problemas del mundo no han cambiado mucho…

El colectivo, que fue precursor de los grafitis con mensajes antiguerra, anarquistas, feministas y anticomunistas y del movimiento “okupa”, fue más allá cuando entre 1983 y 1984, ya con cierta popularidad, formaron parte de las acciones Stop the City contra la guerra, la opresión y el complejo militar financiero.

Parte de las actividades fue la de bloquear junto con 3 mil personas, durante un día entero, la calle principal del distrito financiero de Londres, lo que según el diario The Times generó un déficit de 100 millones de libras esterlinas. El objetivo: que se dejaran de financiar económicamente las guerras.

Otra de las acciones directas que captó la atención de la prensa, e incluso la policía británica y sus servicios secretos, fue la aparición del casete “Thatchergate”, que los integrantes de Crass construyeron usando fragmentos de la voz de Margaret Thatcher y Ronald Reagan.

En la cinta se escucha a Reagan y Thatcher conversando por teléfono, discutiendo sobre el hundimiento del buque militar HMS Sheffield en la Guerra de las Malvinas y sosteniendo que Europa sería el lugar ideal para experimentar con bombas atómicas en cualquier conflicto que se desatara entre Estados Unidos y la Unión Soviética.

Aunque el casete no estaba firmado llegó a manos del Departamento de Estado de Estados Unidos, cuyos miembros, aunque parezca inconcebible, creyeron que era propaganda “roja” producida por la KGB de la Unión Soviética. El hecho quedó consignado en planas de importantes diarios estadounidenses.

LA DISOLUCIÓN Y LA GIRA DE STEVE IGNORANT

Crass se disolvió oficialmente el 7 de junio de 1984 tras dar un concierto en Aberdare, Gales, a beneficio de los mineros que aún seguían en huelga en gran parte de Inglaterra.

El motivo principal de su disolución, como la propia banda aceptó, fue un juicio en su contra que emprendió el gobierno encabezado por Tatcher, la llamada Dama de Hierro, por su sencillo “How Does It Feet…” el cual fue tachado de obsceno, lo cual los llevó a afrontar un largo y complejo periplo legal que al final los terminó cansando.

En 2011 Steve Ignorant, con algunos músicos invitados, realizó una extensa gira mundial en la cual no participó Penny Rimbaud salvo en un palomazo en alguno de los conciertos para interpretar en voz y batería “Do They Owe Us A Living”.

¿Qué escuchar de ellos y dónde?

The Crassical Collection, algunos discos de la banda reeditados en 2010, están disponibles en Spootify:

– The Feeding of the 5000

– Stations of the Crass

– Penis Envy

– Christ – The Album

– Yes Sir, I Will

– Ten Notes on a Summer’s Day

Las ilustraciones de los álbumes remasterizados están hechas por la artista surrealista Gee Vaucher, quien toda su vida ha sido parte de la comuna punk Crass.

La canción más popular de la banda es Punk is Dead, quinto track del clásico The Feeding of the 5000, en la que la banda afirma que el punk se convirtió en un producto más del consumismo (una moda) y narra la deplorable inclusión de bandas como The Clash o la cantante Patti Smith al establishment.

Grandes entre los grandes

La revista Rolling Stone tiene en el número 36 de su lista de los 40 grandes álbumes del punk de todos los tiempos al disco Penis Envy (1981) el cual catalogan como un álbum “antisexista que presenta divagaciones radicales para respaldar su postura política”.

El Museo de Arte Contemporáneo de Los Ángeles (MOCA) le dedicó a la banda, y su diseñador Dave King, uno de los capítulos de la serie “The Art Of Punk” que busca revitalizar y dotar de significados a los diseños y estructura mediática, como flyers, portadas de discos, vestimenta, tatuajes y más, que rodean a este género musical contestatario.