Bon Scott, el salvaje vocalista de ACDC que murió solo e intoxicado en un pequeño auto

Un pequeño Renault 5 fue la última morada del mítico vocalista de ACDC, Bon Scott. La mañana del 19 de febrero, sus amigos lo encontraron muerto al interior del auto, el hombre se había ahogado con su propio vómito; ese día el Rock perdió a uno de sus más grandes vocalistas.

Scott, miembro de una de las miles de familias que migraron de Reino Unido a Australia en la década de los 50, se unió a ACDC en 1974 para sustituir al cantante Dave Evans, quien había tenido serios enfrentamientos con los verdaderos líderes de la banda, los hermanos Young.

Un pequeño Renault 5 fue la última morada del mítico vocalista de ACDC, Bon Scott. La mañana del 19 de febrero, sus amigos lo encontraron muerto al interior del auto, el hombre se había ahogado con su propio vómito; ese día el Rock perdió a uno de sus más grandes vocalistas.

Scott, miembro de una de las miles de familias que migraron de Reino Unido a Australia en la década de los 50, se unió a ACDC en 1974 para sustituir al cantante Dave Evans, quien había tenido serios enfrentamientos con los verdaderos líderes de la banda, los hermanos Young.

Antes de unirse a ACDC, Scott ya arrastraba un historial de mal comportamiento por toda Australia, incluso presumía a menudo haber sido uno de los primeros músicos de rock australiano en ser arrestado por posesión de marihuana,

El primer encuentro entre Scott y los Young dista mucho del glamour, de hecho, el cantante era el chofer de la furgoneta en la que viajaba el grupo. “Conducía como un loco y a toda velocidad”, dijo alguna vez Malcolm Young; quizá de allí vino la inspiración para la famosa Highway to Hell.

La voz de Scott, salvaje, llena de energía, un tanto rasposa y, probablemente con aliento a alcohol, se convirtió en el elemento perfecto para una banda con las mismas características, un año después de ser reclutado, los australiano publicaron su primer disco High Voltaje.

La unión entre los jóvenes australianos se convirtió en la combinación perfecta, no sólo en la parte de la música, sino también en el de las letras, pues Scott también fue incorporado como compositor en muchos de los grandes éxitos de la banda.

La energía de Scott sobre el escenario era genuina, incluso la revista Rolling Stone llegó a considerarlo uno de los mejores frontman de la historia del rock, por delante de monstruos del género como Freddie Mercury y Robert Plant.

En alguna ocasión, Scott se lastimó la pierna durante la grabación del vídeo musical de la canción Let There Be Rock, durante el clímax final de la canción, Scott decidió lanzarse desde lo alto de un escenario, lo que le provocó una grave lesión en la pierna.

A partir del minuto cuatro se puede observar el momento del accidente:

La fama y talento de ACDC comenzaron a ser demasiado grandes para Australia, por lo que comenzaron giras por todo el mundo, la banda estaba a punto de dar el paso final para consolidarse como uno de las más grandes, pero la mañana del 19 de febrero lo cambio todo.

La madrugada del martes 19 de febrero, el vocalista y su amigo Alistar Kinnear, salieron del bar Music Machine, su compañero se ofreció para llevarlo en su Renault 5 hasta su casa, durante el camino, Kinnear notó que Scott se durmió en varias ocasiones.

Al llegar a la casa del vocalista, Kinnear no logró despertar a Scott, por lo que decidió llevárselo a su casa, pero al llegar allí tampoco logró que despertase, por lo que decidió dejarlo a dormir en el coche, 15 horas después, el sujeto encontró a la voz de ACDC muerta en el auto.

Los amigos de Scott que estaban aquella noche en el bar han asegurado que el músico no iba borracho, por lo menos no al grado para de morirse asfixiado por su propio vómito, por lo que para algunos fans el deceso siguen siendo un misterio, sin embargo, para la policía el motivo fue claro, Scott murió por intoxicación etílica y broncoaspiración.

Poco después de su muerte, los Young decidieron seguir con la banda y reclutaron a Brian Johnson como sustituto para grabar el disco Back in Black, el tercer disco más vendido en la historia de la música y el cual fue grabado como homenaje póstumo a Scott.

 

 

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