Redes de poder MTY: Migración a mando único será gradual y el Congreso le responde a Samuel

La propuesta de un mando único policial para el municipio de Monterrey tendría que analizarse de manera profunda y con un criterio profesional. Hoy, Fuerza Civil y la Policía Regia comparten atribuciones en materia de seguridad, es decir, se reparten la vigilancia de las colonias de esta entidad, algo que no ha sido totalmente funcional.

Como bien dice el alcalde regio, Luis Donaldo Colosio Riojas, en caso de que se migrara al mando único, esto sería de manera gradual, pero además, esto debería venir acompañado de una estrategia amplia de cómo será la cobertura de vigilancia, lo cual, hasta el momento, no se ha presentado.

Pero, lo más importante, los elementos regios deben aplicar lo que establece el nuevo Sistema Penal Acusatorio, donde los policías, además de investigar el delito, llevan a juicio a los presuntos delincuentes.

El reto del mando único es mayúsculo para el nuevo titular de la Policía de Monterrey, Alejandro Garza y Garza, y veremos si cumple con la expectativa de mejorar la seguridad en la capital regia. La exigencia por parte de Colosio es mucha.

El Congreso le responde a Samuel

La falta de cortesía política por parte del gobernador Samuel García hacia diputados del Congreso local por las ratificaciones del tesorero Carlos Garza y de la contralora María Teresa Herrera Tello ya tuvo secuelas para el gobierno emecista.

Por lo pronto, ambas dependencias están acéfalas y los nombramientos no tienen sustento legal porque aún no han sido ratificados los titulares por los diputados locales, una facultad que está establecida en la Constitución local.

Los dos funcionarios, sí o sí, tendrán que comparecer el próximo viernes en el Poder Legislativo y después serán ratificados. Al menos Garza primero tendrá que rendir cuentas sobre el endeudamiento que tienen las finanzas estatales.

Parece que García cometió un error político al anunciar la continuidad de los dos funcionarios sin tomar en cuenta al Congreso

Pero si el gobernador no recompone su tacto político podemos tener a corto plazo una fricción con los diputados. Veremos qué tan críticos son los legisladores con Garza y Herrera Tello.