Redes de Poder: Bonilla de regreso en el Senado

Ahora que el exgobernador de Baja California Jaime Bonilla se reintegra al Senado de la República, ya con la resolución de la Sala Superior del TEPJF, se ha generado inquietud en el grupo parlamentario de Morena por el papel que podría tomar en las próximas semanas, previo al arranque del periodo ordinario. Y es que en estos momentos, aunque el principal candidato para ocupar la presidencia de la Mesa Directiva, respaldado por Ricardo Monreal, es el poblano Alejandro Armenta, aún no hay consenso en la bancada guinda. Ya también ha levantado la mano el senador José Narro, y un grupo de legisladores del ala dura de Morena podrían impulsar a Gabriel García. Y si Bonilla decide también candidatearse, como ha ido deslizando discretamente, la definición podría complicarse. ¿Regresará para entrar de lleno a la grilla o lo hará de momento con un bajo perfil?

El desfile de la Guardia… y de Rosa Icela

El plan de volver a la Guardia Nacional la protagonista del desfile militar del 16 de septiembre marcha firme, al menos en los preparativos, pues la corporación podría componer hasta 70 por ciento del contingente, según lo que se pudo saber durante la reunión del gabinete de seguridad federal. La Sedena tendría solo 20 por ciento y la Semar el 10 restante. Pero eso no sería todo, pues, además, el general Luis Cresencio Sandoval compartiría el micrófono ese día con la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.

Zona sin Ley

Nos dicen que la situación en la Ciudad Cooperativa Cruz Azul, en Hidalgo, se ha vuelto insostenible para trabajadores y sus familias. Además de los abusos a derechos humanos, falta de condiciones mínimas para laborar y el deterioro de las instalaciones, integrantes de la comunidad han reportado en fechas recientes la presencia de hombres armados en la zona, quienes constantemente vigilan los accesos a la planta, amenazan e incluso han llegado a activar sus armas en contra de todo aquel que se acerca. Toda esta situación se ha venido agravando desde la toma violenta por parte de un grupo ajeno a la cooperativa, nos dicen, aunque la situación está peor que nunca, y trabajadores y sus familias viven bajo la amenaza del grupo que hoy controla las instalaciones.