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100 por ciento mexicano

Luisa Bulnes, de 33 años y regia de nacimiento, es la fundadora de Huecani. Después de haber hecho prácticas en el restaurante Pangea, a pedido de su madre para ver si realmente era la gastronomía su verdadera pasión, se va al DF a estudiar en la escuela de Ambrosía.

A la vez que trabajaba en las instalaciones de esta empresa banquetera.  

Ahí permaneció durante cinco años.  Luego se va a España a estudiar en la escuela de Hostelería de Valencia, donde hizo un diplomado de cocina mediterránea, a la vez que trabajaba en el restaurante de la escuela.

Luisa Bulnes, de 33 años y regia de nacimiento, es la fundadora de Huecani. Después de haber hecho prácticas en el restaurante Pangea, a pedido de su madre para ver si realmente era la gastronomía su verdadera pasión, se va al DF a estudiar en la escuela de Ambrosía.

A la vez que trabajaba en las instalaciones de esta empresa banquetera.  

Ahí permaneció durante cinco años.  Luego se va a España a estudiar en la escuela de Hostelería de Valencia, donde hizo un diplomado de cocina mediterránea, a la vez que trabajaba en el restaurante de la escuela.

Regresa a Monterrey a trabajar dando clases en instituciones de gastronomía. En un viaje a Oaxaca con sus alumnos de la escuela, queda enamorada de un molino que vio en uno de los pueblitos que visitaron y así empieza su aventura con el maíz.

Resultando esta muy grande, profunda, intensa y con mucho que aprender y respetar.

En el 2010 instala su molino en Monterrey y empieza a trabajar con los diferentes tipos de maíz, como el blanco, pinto y azul, siendo este último el que más utiliza en la fabricación de sus productos.

El primer año empieza a aprender el dominio de la nixtamalización, del rallado, los tiempos de cocción, porcentajes de cal, tipos de maíz, etc…

Sin venir de familia de rancho, Luisa logra producir en el molino masa, tortillas, tlacoyos, sopes, guaraches y una pequeña producción de tamales. 

Su menú es corto y sencillo, “de comida callejera”.

La masa no tiene manteca, solo utiliza tres ingredientes: maíz, cal y agua. 

No utiliza sal, ya que los guisados son los encargados de terminar de darles este punto, ayudados por lo que aporta la cal.

No utiliza Maseca, todo es a base de maíz nixtamalizado, nada de colorantes ni saborizantes.

Al no utilizar manteca hace que sus productos nos sean pesados y además son vegetarianos y veganos.

Su menú básico consta de tlacoyos de chicharrón, haba y frijol.  Quesadillas de queso asadero, queso Oaxaca, tinga de pollo, hongos, rajas con queso y picadillo. O de deshebrada y chicharrón. Así como sopes de deshebrada, chicharrón y picadillo.

Y tacos, que vienen en tortillas grandes y pueden ser de costilla en salsa tatemada, de muslos de pollo en mole oaxaqueño, de nopal en chile colorado y de guisado de milpa, a base de elote, calabaza y tomate.

Tiene platillos de temporada, como actualmente las quesadillas de orejones de calabaza, tamal de chocolate, tlacoyo de camarón y el asado verde.

De bebidas hay agua de Jamaica o de guayaba y de postre ¡pan de elote!

Sus precios son muy accesibles, las mesas principales son largas como de mercado, con la idea que la sean comunales y la gente pueda compartir.

Los fines de semana podemos encontrar en su menú platillos como barbacoa de borrego, consomé de borrego, chilaquiles, huevos estrellados, etc.

El nombre Huecani, significa “antiguo” en Náhuatl, y lo eligió porque va con su concepto del rescate de esta técnica del nixtamalizado.

Huecani es un restaurante sencillo, sin pretensiones, con un enfoque único en los productos a base de maíz. Platillos 100 por ciento mexicanos, con énfasis en la calidad.  Elaboración de primera clase y en su consecuencia alimentos saludables.

Dirección:
Av. Vasconcelos 647, San Pedro, Garza García.
Horario: De martes a viernes, comida y cena (12:30 pm -10:00 pm). Sábados y domingos desayuno
y comida

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