¿Una Cuba reformada?
El nuevo presidente de Cuba busca transformar a la isla mediante reformas constitucionales que incluyen la legalización del matrimonio igualitario, sin embargo, el mandatario continúa con la represión a opositores del régimen
Mariana RecamierMiguel Díaz-Canel lleva más de 100 días como presidente de Cuba y las acciones de su gobierno durante los primeros meses parecen una herencia directa de Raúl Castro. En este primer periodo, el nuevo mandatario retomó el proyecto de reformas constitucionales y dio continuidad a la represión de los opositores al régimen.
Las primeras acciones del nuevo líder cubano tienen contrastes. Mientras las reformas en la carta magna buscan que se respeten los derechos de la personas que pertenecen a la diversidad sexual y ofrecen oportunidades de desarrollo económico a los ciudadanos, organizaciones denuncian que el nuevo gobierno viola las garantías fundamentales de activistas.
Una de las primeras decisiones de Díaz-Canel fue el apoyo al proyecto de reformas en la Constitución cubana. En el documento que incluye los cambios, el gobierno del nuevo presidente se desprendió del término comunismo y declaró que el socialismo es la política de Estado.
La palabra fue eliminada de la iniciativa de reformas, pero el Partido Comunista aún se plantea como la única fuerza política.
Esteban Lazo, presidente de la Asamblea Nacional cubana, declaró que el anteproyecto ratifica el papel rector del Partido y la irrevocabilidad del modelo político y económico actual.
Carlos Alberto Bautista, especialista en derecho internacional de la Universidad la Salle, explica que una de las diferencias entre el comunismo y el socialismo radica en la apertura a la inversión extranjera y la propiedad privada.
“En el comunismo el Estado es el propietario de todos los medios de producción, en cambio, en el socialismo el Estado es propietario de la mayor parte de los bienes de producción, pero a final de cuentas permite contemplar la inversión extranjera y que los particulares tengan negocios”, argumenta el maestro en derecho.
El proyecto de las reformas constitucionales también incluye el reconocimiento de la propiedad privada, no obstante, hace unas semanas el gobierno anunció que en el próximo diciembre entrarán en vigor nuevas regulaciones para este tipo de patrimonio.
“Los cambios en la constitución reflejan la posibilidad de que el sistema productivo cubano contenga empresas privadas, sin embargo, al mismo momento que se está haciendo ese anuncio salen un grupo de regulaciones que van dirigidas a limitar el crecimiento de la pequeña empresa privada con el objetivo de que no se acumule riqueza y que no haya concentración de la propiedad”, afirma Pavel Vidal Alejandro, doctor cubano en ciencias económicas.
Por otra parte, Vidal Alejandro agrega que las reformas llevan muchos años estancadas y que parece que el actual presidente de Cuba no acelerará estos procesos.
“La reforma cubana prácticamente está detenida desde hace tres o cuatro años y hasta ahora con Díaz-Canel todo se mantiene lento”
El doctor en ciencias económicas añade que una señal de la lentitud en la modernización constitucional cubana es que actualmente el gobierno no ha anunciado nada nuevo sobre las reformas monetarias.
Por otra parte, a partir de la reforma del artículo 68 de la carta magna estipulada en el anteproyecto de la constitución se abren las puertas a la legalización del matrimonio igualitario en la isla. En la actual constitución, sólo se admite la unión conyugal entre hombre y mujer.
Homero Acosta, secretario del Consejo de Estado en Cuba, dijo que en la renovación del referido artículo se define el matrimonio como la unión concertada entre dos personas sin especificar el género.
“Se quiere permitir el matrimonio igualitario porque a final de cuentas es un contrato entre dos personas que no llega más allá”, opina Bautista.
El especialista en derecho constitucional añade que las últimas reformas anunciadas buscan ceder algunos derechos para que el gobierno no tenga que responder a otras demandas de los cubanos, tales como mejor calidad de vida y salir del país de forma más sencilla.
“El propio régimen lo que trata de hacer es dar pequeñas concesiones para que los ciudadanos crean que hay cambios, pero apenas sería la punta del iceberg”
Continúa la represión
Por otra parte, al cumplirse los primeros 100 días de gobierno de Miguel Díaz-Canel, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) publicó un comunicado en el que se denuncia que el nuevo gobierno ha profundizado los métodos represivos y otras formas de acoso y hostigamiento contra la sociedad civil.
El observatorio señala que en este periodo el gobierno cubano ha prohibido salir del país a más de veinte personas y se ha incrementado el número de presos políticos con 12 nuevos encarcelados.
De ellos, tres integrantes de las Damas de Blanco, un movimiento ciudadano cubano que reúne a esposas y otros familiares de presos cubanos, y nueve miembros de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) ingresaron en prisión.
Además, el observatorio menciona que aunque el índice de detenciones arbitrarias se ha reducido circunstancialmente, se aprecia una mutación hacia un tipo de represión personalizada.
La organización explica que este tipo de represión se estructura a partir de la confección de perfiles psicológicos que incluyen todos los datos personas de los opositores al régimen.
“Siempre ha sido así en las últimas décadas, pero ahora vuelve con intensidad y en forma de chantaje contra los activistas de derechos humanos”, cita el comunicado.
El OCDH denuncia que esta política represiva es implementada por los órganos de la Seguridad del Estado contra las organizaciones pacíficas más activas en el reclamo del respeto a los Derechos Humanos, como son las Damas de Blanco y la UNPACU.