Tête à tête
Falta un año para que se celebren las elecciones presidenciales en Estados Unidos. No hay nada escrito. Muchas cosas pueden suceder entre hoy y el 8 de noviembre de 2016.
Los republicanos celebraron su cuarto debate el miércoles pasado y los demócratas se enfrentarán por segunda ocasión mañana por la noche.
Del lado conservador, el espectáculo mediático promete durar un poco más y todavía se esperan nuevos vuelcos de fortuna para todos los precandidatos republicanos.
Sergio AlmazánEl segundo debate del partido demócrata se realizará mañana a las 20 horas en la ciudad de Des Moines, Iowa y será transmitido en conjunto por Twitter y la cadena CBS. Participarán solo tres candidatos: Clinton, Sanders y O’Malley
"Nuestro país necesita un nuevo liderazgo para salir de estos tiempos de división”
"Si observas lo que pasó en nuestro debate y lo comparas con el republicano, verás que el nuestro fue sustantivo y enfocado en asuntos importantes”
a la presidencia"Los republicanos creen que hacer política es atacarse mutuamente de forma estúpida y destructiva. Lo que estamos tratando de hacer nosotros es tener un debate serio sobre los asuntos importantes para Estados Unidos”
Falta un año para que se celebren las elecciones presidenciales en Estados Unidos. No hay nada escrito. Muchas cosas pueden suceder entre hoy y el 8 de noviembre de 2016.
Los republicanos celebraron su cuarto debate el miércoles pasado y los demócratas se enfrentarán por segunda ocasión mañana por la noche.
Del lado conservador, el espectáculo mediático promete durar un poco más y todavía se esperan nuevos vuelcos de fortuna para todos los precandidatos republicanos.
La nominación demócrata está casi en la bolsa de Hillary Clinton. Sin embargo, ese cabeza contra cabeza entre la ex Primera Dama y el septuagenario Senador de Vermont aún puede arrojar algunas sorpresas en los próximos tres meses.
El elefante impredecible
La candidatura republicana es, hasta el día de hoy, una incógnita. El futuro candidato presidencial del Good Old Party (GOP) es todavía un monstruo de 10 cabezas.
El debate del miércoles fue ligeramente superior a los anteriores. Hubo algunas propuestas, pero en general continuó siendo un circo de ataques y declaraciones controversiales.
Jeb Bush, quien arrancó como favorito, cayó en las encuestas durante todo el último mes. Todavía no se da por vencido, pero parece que no tendrá tiempo para revivir su campaña.
Marco Rubio y Ted Cruz fueron los ganadores del cuarto debate, pero Trump y Carson todavía lideran las encuestas.
En cuanto a los otros seis precandidatos, no se sabe si se retirarán pronto de la carrera presidencial o no. Con base en los giros que se han dado en esta contienda en los últimos meses, tal vez sea demasiado pronto para que cedan su apoyo a uno de los cuatro punteros.
El demócrata: Un debate diferente
La cadena de noticias Fox se encargó de transmitir y moderar el debate republicano.
Fox es conocida por un enfoque amarillista y de ultra derecha, y ha sabido darle justo ese toque a los enfrentamientos de los precandidatos conservadores.
Los republicanos aventajan con dos debates a los demócratas. Esto es un indicador de una necesidad manifiesta de aparecer constantemente en los medios, para poder avanzar en las encuestas.
Los demócratas, por su parte, han sido más económicos y sustanciosos en sus intercambios. A diferencia de los 26 debates que precedieron a la elección de Barack Obama en 2008, esta vez el Partido Demócrata ha pactado solo seis encuentros.
Ya se realizó el primero, exactamente hace un mes. El de mañana será diferente. Se ha reducido el número de participantes. Sólo los punteros – Hillary Clinton, Martin O’Malley y Bernie Sanders – se verán las caras de ahora en adelante.
Los candidatos que no figuraban de manera relevante en las encuestas están fuera de la contienda. Esto le dará más tiempo a los tres precandidatos para elaborar mejor sus argumentos.
El número de eventos, la depuración de participantes y el tiempo de duración de los debates no serán las únicas diferencias del evento de mañana con respecto a los debates republicanos.
La plataforma y los moderadores también serán diferentes. La cadena de televisión CBS y la red social Twitter se han asociado para producir el segundo debate demócrata.
Esto es una clara señal del tipo de público al que va dirigido y la clase de discusión que se espera.
Lo anterior anticipa una oportunidad para Bernie Sanders. La gran mayoría de sus seguidores son jóvenes, para quienes Twitter es una importante fuente de información.
Pronóstico
Martin O’Malley tuvo una buena actuación en el primer debate y su aproximación mesurada y tradicional fue bien recibida por los que todavía creen que la ideología de Sanders se ubica demasiado a la izquierda.
Las encuestas no favorecen a O’Malley, pero si Sanders comete errores graves en el debate de mañana, la balanza se puede inclinar del lado del gobernador de Maryland. Esto es poco probable.
Hillary Clinton todavía le saca 10 puntos de ventaja a Bernie Sanders y sigue siendo la clara favorita.
La nominación ha sido suya desde el principio y si mañana logra conectar con los indecisos, con los partidarios de O’Malley y con más minorías, en tres meses será la próxima candidata demócrata a la presidencia de EU.
Bernie Sanders ha sido el candidato que no tiene nada que perder. Sin embargo, mañana tendrá una dura prueba.
Sanders tendrá que comprobar que su popularidad va más allá de una moda temporal. Si logra convencer a la audiencia de que tiene madera de estadista, Bernie pondrá a temblar a Hillary Clinton y a todos los conservadores de Estados Unidos.
Resumen del 4º debate republicano
> La mayoría lo consideró un debate más serio que el tercer debate
> Ben Carson y Donald Trump siguen a la cabeza de las encuestas pero Marco Rubio y Ted Cruz tuvieron una buena noche. Según los analistas republicanos, si se tuviera que elegir a un candidato con base solo en el debate, Cruz y Rubio llevarían la delantera
> Fiorina, Paul y Kasich evidenciaron sus pocas posibilidades de ser nominados
> Jeb Bush se mantuvo gris y sus posibilidades se apagan
Citas para el anecdotario:
“Si aumentamos el salario mínimo, la gente será más cara que las máquinas”
Marco Rubio
“Para hacer lucir a ISIS como perdedores, tenemos que destruir su califato”
Ben Carson
“Si creen que los muros no funcionan, pregúntenle a Israel”
Donald Trump
“Los plomeros ganan más que los filósofos. Necesitamos más plomeros y menos filósofos”
Marco Rubio
“Los demócratas se están riendo”
Ted Cruz