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Por admitir sus vicios es un alcalde popular

El consumo de alcohol, cocaína y crack coloca en medio de la polémica al alcalde de Toronto, Rob Ford.

El escándalo se agudizó ayer, cuando Ford admitió ante medios canadienses que, pese a no ser un adicto, sí ha probado el crack y la cocaína.

Hizo esta declaración luego de que la Policía de Toronto filtrara la semana pasada a los medios un video en el que el munícipe aparece consumiendo narcóticos. 

El consumo de alcohol, cocaína y crack coloca en medio de la polémica al alcalde de Toronto, Rob Ford.

El escándalo se agudizó ayer, cuando Ford admitió ante medios canadienses que, pese a no ser un adicto, sí ha probado el crack y la cocaína.

Hizo esta declaración luego de que la Policía de Toronto filtrara la semana pasada a los medios un video en el que el munícipe aparece consumiendo narcóticos. 

“Sí, sí he consumido cocaína, pero no, no soy un adicto”, expresó Ford en conferencia de prensa. “¿La probé? Probablemente en uno de mis episodios alcohólicos, probablemente hace un año”.

De hecho, las copas de más le causaron problemas en agosto pasado, cuando los medios canadienses lo descubrieron vagando por las calles de Toronto en estado de ebriedad después de un festival callejero.

Aunque ha admitido que ha bebido de más en varias ocasiones “como cualquiera”, el político independiente niega tener problemas con el alcohol. 

Más popular

Pese a que sus opositores piden su renuncia, la manera en que el alcalde ha lidiado con estos incidentes ha tenido un efecto positivo en su popularidad.

De acuerdo con medios canadienses, una encuesta hecha por Forum Research reveló que, a pesar de los videoescándalos, la popularidad de Ford aumentó de 39 a 44 por ciento en la última semana.