El candidato presidencial republicano, Donald Trump, logró resistir la presión de la demócrata Hillary Clinton durante el segundo debate, aunque no se impuso en la discusión, el republicano evitó caer otro escaño y logró mantenerse con aspiraciones para el tercer y último careo.

Trump comenzó un perfil bajo, dijo sentirse avergonzado y pidió perdón por los comentarios que se dieron a conocer en los que se expresaba de manera vulgar de las mujeres, lo cuales le han costado perder el apoyo de más de 150 líderes republicanos.    

El segundo debate entre Hillary Clinton y Donald Trump podría ser el último clavo en el ataúd republicano, pues después que se diera a conocer un vídeo en el que aseguró que él besa y toca a las mujeres sin su consentimiento, deberá aclarar ante millones de personas su comportamiento.

Tras del primer debate presidencial, Trump se ha visto inmiscuido en una mala racha, principalmente por la información publicada por el New York Times, la cual señaló que el magnate podría haber evitado el pago de impuestos hasta por 18 años.