No hay imagen disponible

Más teléfonos que baños

Los teléfonos celulares han facilitado la vida de millones de personas, pero contar con un baño para realizar sus necesidades físicas sería aún mejor.

A pesar de los avances en materia económica y calidad de vida que se han realizado en América Latina en la última década, todavía es más fácil para los latinoamericanos tener acceso a un teléfono celular que a un inodoro.

Los teléfonos celulares han facilitado la vida de millones de personas, pero contar con un baño para realizar sus necesidades físicas sería aún mejor.

A pesar de los avances en materia económica y calidad de vida que se han realizado en América Latina en la última década, todavía es más fácil para los latinoamericanos tener acceso a un teléfono celular que a un inodoro.

En una región donde, según datos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones de la ONU, hay 109.4 celulares por cada mil habitantes, aún hay alrededor de 120 millones de personas que carecen de acceso a un baño, o al menos a un lugar sanitariamente seguro para realizar sus excreciones.

Según el informe de actualización 2013 “Progresos en materia de saneamiento y agua potable”, publicado por la UNICEF a principios de semana, más de dos mil 500 millones de personas en el planeta carece de ese servicio en sus hogares, es decir más de un tercio de la población mundial.

En la última década en América Latina, más de 70 millones de personas dejaron la pobreza, y aún así “el acceso a un inodoro sigue siendo un secreto innombrable y vergonzoso que afecta incluso a algunos países muy prósperos”, aseguró el jefe mundial de los programas de Agua, Saneamiento e Higiene (WASH) de UNICEF, Sanjay Wijesekera.

Te puede interesar
DESARROLLO Construirán en NL estancias para ancianos

Waldo Fernández, diputado federal, logró que una reforma de ley impulsada por él se convirtiera en una obra para el beneficio de la comunidad de adultos mayores y personas con discapacidad.

El legislador firmó el convenio de transparencia de recursos federales para la construcción de estancias de día, que se logró gracias a la reforma a la Ley de Adultos Mayores y a los 48 millones de pesos que gestionó en el Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2017.

“Estas estancias de día para adultos mayores forman parte de mi legado legislativo”, aseguró Fernández.