los países nórdicos regresa a la izquierda y AMLO quiere copiar su modelo

La región ejemplar de los países nórdicos

Tres países nórdicos tienen gobiernos de izquierda con políticas de conciliación. El presidente de México quiere seguir el ejemplo de estas naciones, pero recorta el tipo de programas que utilizan las administraciones de esta región

La región de países nórdicos regresa a la izquierda poco a poco y el presidente Andrés Manuel López Obrador toma a los países que integran esta zona como ejemplo para sus políticas según sus propias palabras, sin embargo, las primeras acciones del gobierno mexicano van en un camino distinto a las administraciones de naciones como Dinamarca, Suecia y Finlandia.

Dinamarca es el tercer país nórdico este año en formar un gobierno de izquierda después de que la ahora primera ministra danesa Mette Frederiksen acordara los términos para una administración minoritaria de partido único.

Este país se suma a Finlandia y Suecia, que también formaron este año gobiernos socialdemócratas, aunque en estos casos las administraciones son de coalición e incluyen partidos que siguen otras líneas políticas.

Ante esta nueva presencia de los partidos de izquierda gobernando la región nórdica y la buena fama de sus políticas, López Obrador los contempla como ejemplo para cambiar el sistema de salud mexicano y lograr eliminar la corrupción, la inseguridad y otros problemas sociales del país.

“Debemos seguir el ejemplo de países donde no hay corrupción y sin corrupción no hay pobreza, no hay inseguridad y no hay violencia”, indicó el presidente el jueves pasado después de firmar un acuerdo para fortalecer Pemex.

El mandatario agregó que se refería a los países nórdicos Suecia, Dinamarca y Noruega, que ocupan los primeros sitios en honestidad. Estos tres Estados se encuentran entre los cinco que tienen menos corrupción en el mundo, de acuerdo con el Índice de Percepción de la Corrupción de la organización Transparencia Internacional.

No es la primera vez que López Obrador menciona a estas naciones en sus discursos. En abril, el mandatario se comprometió que en tres años la calidad de los servicios de salud mexicanos será igual a la que hay en los países nórdicos, los cuales dan a su población acceso a todos los medicamentos.

El mandatario añadió que en ese mismo periodo de tiempo la atención médica y los medicamentos serán gratuitos para todos como en Dinamarca, Suecia o incluso Canadá.

“Ese es mi compromiso, pero no puedo hacerlo de la noche a la mañana porque implicará mejorar las 20 mil unidades médicas rurales de primer nivel, que funcionen todos los servicios de salud de segundo nivel y mejorar la medicina especializada y que no falten medicamentos”, comentó en su conferencia de prensa matutina.

La doctora en ciencias sociales y experta en la Unión Europea Marta Ochman explica que López Obrador sólo utiliza a los países nórdicos como una referencia de éxito en sus discursos, pero las prácticas del gobierno mexicano son muy distintas a las de estas naciones.

“Es parte del discurso porque en general los partidos de izquierda escandinavos son considerados como los que tienen mayor éxito en cuanto a construir sociedades cohesionadas sin una gran desigualdad”, asegura la especialista en la Unión Europea.

Ochman puntualiza que López Obrador menciona a los países nórdicos en sus discursos porque en cuestiones de salud los funcionarios de izquierda de estas naciones apoyan los servicios públicos y son exitosos en las políticas de conciliación para las mujeres.

De acuerdo con la especialista, las políticas de conciliación son una red de servicios públicos enfocados al cuidado de niños y personas mayores.

Estas iniciativas permiten que las mujeres, quienes históricamente se encargaron de las labores de cuidado, tengan acceso a servicios como las guarderías públicas y eso ayuda a que puedan trabajar.

“La integración tan exitosa de las mujeres en países escandinavos al mercado de trabajo fue por estas políticas”, considera Ochman.

No obstante, el gobierno de López Obrador eliminó políticas como estas en sus primeros meses, por ejemplo, creó un nuevo modelo de entrega de apoyos directos que sustituyen el financiamiento que se entregaba a estancias infantiles.

Ochman asegura que en el único aspecto en que hay semejanzas entre el gobierno mexicano y las administraciones nórdicas son las políticas migratorias.

La primera ministra de Dinamarca Mette Frederiksen tiene un discurso a favor del control de flujos migratorio. López Obrador no habla de control, pero sí lo aplica mediante el despliegue de al menos 6 mil elementos de la Guardia Nacional en la frontera sur de México.

Los países nórdicos tienen una visión progresista y la administración mexicana se considera progresista, pero en esos temas no lo es. Su perspectiva es la del Estado benefactor corporativo que considera al hombre como principal proveedor que debe recibir servicios que cubren a su familia y a su esposa, pero la mujer no tiene oportunidades
Marta OchmanEspecialista en Unión Europea

El regreso de la izquierda en los países nórdicos

Por otra parte, la doctora considera que la izquierda regresa al poder en los países nórdicos, pero no de una manera tan contundente porque lo hace en coalición con partidos de otras líneas ideológicas. Además, la especialista piensa que el gobierno cambia de color en esta región por cuestiones cíclicas.

El ejemplo más reciente del regreso de la izquierda en la zona nórdica es Dinamarca, un país que se encuentra en tiempos de transición. El Partido Socialdemócrata danés logró el miércoles pasado un acuerdo para gobernar en solitario con el apoyo externo del resto del llamado “bloque rojo” por su línea de izquierdas: Social Liberales, Socialistas Populares y la rojiverde Lista Unitaria.

El acuerdo incluye un documento de 18 páginas que se llama Una dirección justa para Dinamarca donde los cuatro partidos de centro izquierda anuncian una nueva agenda medioambiental, más inversiones en sanidad, el fin de los recortes en educación y cambios en la dura política migratoria.

“Es un documento político que, como uno de los primeros en el mundo, eleva las ambiciones verdes. Haremos un plan climático, una ley climática vinculante y reduciremos las emisiones de gases de efecto invernadero en un 70 por ciento en 2030, con respecto a los niveles de 1990”, dijo Frederiksen en una conferencia de prensa en Copenhague.

López Obrador piensa que puede replicar políticas como las del nuevo gobierno danés, sin embargo, los primeros pasos de su gobierno se alejan de la izquierda nórdica que quiere acabar con los recortes e invertir más en sanidad.

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