Por primera vez, distintos representantes mundiales se reunieron en la iglesia donde se realizó el funeral de la reina Isabel II

Jefes de Gobierno se reúnen en funeral de la reina Isabel II de Inglaterra

Con el objetivo de darle el último adiós a la monarca británica, jefes de Gobierno de todo el mundo se agruparon en la Abadía de Westminster, a excepción de los mandatarios de Venezuela, Rusia y Bielorrusia debido a sus diferencias ideológicas con Reino Unido. En representación de México, acudió el canciller Marcelo Ebrard, sumando un evento más al cual no acude el presidente

Por primera vez, distintos presidentes, monarcas y representantes mundiales, se reunieron en un mismo lugar: la Abadía de Westminster, la iglesia donde se realizó el funeral de la reina Isabel II de Inglaterra.

Fue a las 11:00 horas de Londres (5:00 en el Centro de México), que los restos de la monarca se presentaron ante un aproximado de dos mil invitados, entre ellos altos políticos británicos, jefes de Estado y representantes de las organizaciones benéficas que la reina apoyaba.

Entre los invitados extranjeros, destacó la presencia de los reyes de España, Felipe VI y Letizia; de Bélgica, Felipe y Matilde; de Países Bajos, Guillermo Alejandro y Máxima; así como las familias reales de Noruega, Suecia, Dinamarca y Mónaco.

Los representantes de algunos de los países de la Commonwealth también acudieron, como Jacinda Ardern, primera ministra de Nueva Zelanda; Justin Trudeau, de Canadá; y Anthony Albanese, de Australia.

El pasado 8 de septiembre, cuando se confirmó la muerte de la monarca británica, los representantes de la Commonwealth no dudaron en enviar sus condolencias, destacando el respaldo que nunca dejaron de tener de su reina.

“Los últimos días de la vida de la reina capturan quién era en muchas maneras. Trabajando hasta el final en nombre de la gente que amaba”, compartió la ministra neozelandesa.

Al último funeral de la reina también fueron invitados los presidentes de Italia y Alemania, Sergio Mattarella y Frank-Walter Steinmeier, respectivamente; de Estados Unidos, Joe Biden; así como el de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro.

A diferencia del político brasileño que ha recibido múltiples críticas por su ideología conservadora, la cual lo llevó a minimizar la gravedad de pandemia por COVID-19, quienes no recibieron invitación para despedir a la reina de Inglaterra fueron Nicolás Maduro, presidente de Venezuela; Vladimir Putin, de Rusia; y Vicktor Orbán, primer ministro de Bielorrusia.

Aunque la familia real no entró en detalles sobre por qué estas figuras no recibieron invitación, se prevé que fue por la diferencia de ideologías políticas y sociales que tienen con ellas.

Del lado de Venezuela, Reino Unido no reconoce el gobierno de Maduro por carecer de democracia en sus elecciones, y con respecto a Rusia, los británicos rompieron sus relaciones desde que comenzó la invasión a Ucrania en febrero pasado, a la cual el ministro bielorruso ha favorecido.

Al respecto, Daniel Muñoz, docente del Departamento de Relaciones Internacionales de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Aragón, opina que la acción de Reino Unido es interesante, pues a pesar de que lanza una invitación a todos los jefes de Gobierno a nivel mundial, se detiene con aquellos que son ideológicamente contrarios y “contestatarios”.

“Aquí la pregunta sería: Si los hubieran invitado, ¿ellos habrían asistido? Lo más probable es que no”, añade.

Ebrard, presente en nombre de México en funeral de Isabel II

Al igual que otros países, México estuvo presente en el funeral de la reina Isabel II, a través de la asistencia de Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores.

Fue desde el pasado 14 de septiembre que el canciller confirmó su visita a Londres en representación del presidente Andrés Manuel López Obrador, sumando un evento más al cual no asiste el jefe de Gobierno.

Para el internacionalista de la FES Aragón, la inasistencia del político tabasqueño podría estar ligada a la austeridad republicana que representa desde el inicio de su sexenio.

“Aquí vemos una vez más que el presidente prefiere quedar en segundo término y mejor mandar al canciller, que básicamente es la figura que lo representa a nivel internacional (…) El hecho de que no ha realizado tantos viajes fuera del país hace que tampoco acuda a este funeral. Es una congruencia que tratar de mantener”, subraya el docente.

Sin embargo, Muñoz resalta que el jefe de Estado mexicano se perdió de una oportunidad importante al no acudir al funeral de la monarca, principalmente porque pudo interactuar con todos los distintos líderes políticos.

“Cuando de pronto México se separa de esta clase de eventos, queda fuera de esta fotografía, pero no solamente de la fotografía, sino de lo que implica la misma.

“En muchas ocasiones esta clase de eventos sirven mucho también para cabildear, y algo que a la diplomacia mexicana le hace falta es eso: cabildeos, encuentros entre el presidente mexicano con otros mandatarios para acordar muchos temas que hasta cierto punto le serían muy útiles a la nación”, destaca Muñoz.

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