Gracias, Mr. Kennedy

02 de Feb, 2018

La esperanza de los demócratas y dreamers ante el primer discurso del estado de la Unión de Trump es un Kennedy. Cuando se esperaría que la respuesta fuerte del partido opositor fuera un perfil migrante o que aludiera a la diversidad étnica que tanto le molesta al actual presidente de los Estados Unidos, los demócratas confiaron su réplica a Joe Kennedy III, representante en su tercera legislatura del cuarto distrito de Massachusetts en el Congreso.

Se trata de un joven blanco que carga sobre sus hombros un apellido que representa las grandes dinastías políticas de su país. Su nombre proviene de forma directa de aquellos Kennedy que perdieron su vida en un capítulo oscuro de la política estadounidense; es el nieto del senador Robert Kennedy y sobrino nieto del presidente de Estados Unidos John F. Kennedy, ambos asesinados en los años sesenta.

En su respuesta a Trump, el joven Kennedy hizo un repaso por los movimientos que defendieron los derechos humanos en los últimos años, tales como Black Lives Matter y #MeToo, sin embargo, su apoyo más reiterativo fue a los cerca de 800 mil dreamers, aquellos inmigrantes indocumentados que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños.

“Ustedes forman parte de nuestra historia (…) Vamos a luchar por ustedes y no nos vamos a alejar”, pronunció en español desde un instituto de formación técnica en Fall River, Massachusetts.

En su réplica al discurso de Trump, Kennedy también aportó un aire de esperanza al mencionar que está en contra de la construcción del muro que podría separar a Estados Unidos y México. “Te sentaste sobre los hombros de tu madre y sostuviste un cartel que decía: ‘Construye un muro y mi generación lo derribará’. Dices valientemente, yo también”, afirmó para sumarse a las personas que se han manifestado en contra de las políticas migratorias de Trump.

Un político viral

No es la primera vez que Kennedy habla por los dreamers. El último año ha conseguido viralizar videos con sus intervenciones en el Congreso ante los republicanos. Logra confrontar a los congresistas mediante discursos que retoman casos de menores de edad migrantes que vivieron situaciones adversas y luchan por hacer de Estados Unidos un “país mejor”.

S

us posturas migratorias son claras: apoya a los dreamers y se opone a la construcción del muro.

En el Congreso dice a republicanos y demócratas que es su tarea como adultos defender a los niños y jóvenes de aquellas políticas que pretenden enviarlos “a ser extraños en un país extraño”. Sus ideas convencen a los ciudadanos estadounidenses que lo siguen en redes sociales. Entre cientos de comentarios, muchos seguidores lo alientan para buscar la presidencia de Estados Unidos.

Desde el principio

Su labor por los migrantes no se queda en discursos. Después de que la administración de Trump emprendió una serie de redadas de inmigración a partir de febrero de 2017, Kennedy exigió que el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) divulgara los detalles de sus políticas de inmigración y deportación. Los informes de dreamers y arrestos colaterales inquietaron al congresista y es por eso que decidió enviar una carta al DHS.

“Una política de inmigración que opera en las sombras no solo es sospechosa, es peligrosa”, mencionó Kennedy en un comunicado publicado en su página oficial como respuesta a las detenciones arbitrarias. “Al negarse a ofrecer una guía clara sobre las políticas de deportación, la administración de Trump aviva el miedo, obstaculiza el cumplimiento de la ley y socava la seguridad pública. Mientras tanto, sus incursiones dejan en claro lo que su falta de transparencia intenta ocultar: que opera con total desprecio por el estado de derecho…”.

A pesar de todo el ruido que ha generado el discurso de Kennedy en medios de comunicación y redes sociales, algunas asociaciones civiles se muestran escépticas ante sus palabras.

“Ya sólo nos queda esperar para ver qué sucede. Sólo nos queda hacer algo desde nuestras trincheras o desde donde estamos para apoyar a los dreamers… y sobre lo que pueda hacer el Partido Demócrata sólo nos queda esperar”, afirmó en entrevista Maggie Loredo, coordinadora de Otros dreams, organización dedicada al apoyo a personas que vivieron en Estados Unidos y que fueron deportadas o tienen amenaza de deportación.

El congresista podría ser una ficha importante ante la propuesta de Trump de una reforma migratoria que permitiría legalizar a los dreamers a cambio de construir el muro fronterizo.

En un discurso que parece simple, Kennedy dejó claras su dos posturas: su apoyo a los dreamers y su oposición a que se construya el muro. Incluso aseguró que para su partido no es una opción tener que elegir una reforma en la que algunos terminan perdiendo.

“Elegimos las miles de comunidades estadounidenses cuyos caminos no están pavimentados con poder o privilegios, pero con un esfuerzo honesto, buena fe y la determinación de construir algo mejor para sus hijos”.

Con una agenda progresista

Kennedy no sólo se ha caracterizado por defender a los dreamers ante el Congreso. Su agenda como político también destaca por tener ciertos tintes progresistas.

Ha defendido los derechos de las personas transgénero, el matrimonio igualitario y la equidad salarial, no obstante, su enfoque está más relacionado con la salud mental y las adicciones. Los temas que le interesan como político se reflejaron en el lugar que eligió para dar su discurso y en la mujer que decidió invitar.

El congresista habló en Fall River, un pueblo a menos de cien kilómetros de Boston que según sus palabras fue construido por inmigrantes. Su invitada fue la sargento Patricia King, primera persona en recibir una cirugía de cambio de sexo pagada por el Ejército.

Formación

Tiene un doctorado en Derecho por Harvard, donde fue alumno de la senadora demócrata por Massachusetts Elizabeth Warren. Antes de ser elegido para el Congreso, Kennedy prestó servicios en Massachusetts como fiscal auxiliar de distrito tanto en el condado de Middlesex, así como en las oficinas de fiscalías de distrito de Cape and Island. Antes de eso, se desempeñó como miembro del Cuerpo de Paz en la República Dominicana, donde implementó un proyecto de desarrollo econó- mico cerca de Puerto Plata y aprendió a hablar español con fluidez.

Aspectos personales

>Vive con su esposa, Lauren Birchfield Kennedy, experta en políticas de salud, y sus dos hijos, Elanor y James, en Newton, Massachusetts.

>Tiene un hermano gemelo que se llama Matthew Kennedy.

> Heredó la afición de su familia por el equipo de fútbol americano los Patriotas de Nueva Inglaterra.

> En la universidad era conocido como “The milkman” porque nunca consumía alcohol y en cambio pedía un vaso con leche.