La democracia en 140 caracteres

A través de su cuenta de Twitter, Donald Trump sigue avivando el debate político. Todos los días el presidente de los Estados Unidos utiliza la red social para defender sus polémicas políticas, adelantar sus actos de gobierno o retar a sus detractores.

Pero a través de la misma red social también surgen grupos de resistencia, entre ellos @RoguePOTUSStaff, una cuenta no verificada, supuestamente manejada por trabajadores de la administración Trump que está en desacuerdo con sus políticas.

El Twitter de Trump ha servido para lanzar consignas en contra del Poder Judicial, por haber vetado su decreto migratorio, para lanzar amenazas veladas a Irán, o para atacar a ciertos sectores de la prensa 

A través de su cuenta de Twitter, Donald Trump sigue avivando el debate político. Todos los días el presidente de los Estados Unidos utiliza la red social para defender sus polémicas políticas, adelantar sus actos de gobierno o retar a sus detractores.

Pero a través de la misma red social también surgen grupos de resistencia, entre ellos @RoguePOTUSStaff, una cuenta no verificada, supuestamente manejada por trabajadores de la administración Trump que está en desacuerdo con sus políticas.

A través esa cuenta hacen un llamado a la resistencia y “filtran” presunta información de lo que sucede en el interior de la Casa Blanca.

El uso incendiario que Trump hace de su cuenta personal de Twitter y el eco que genera el todo el mundo con cada uno de sus tuits, orillaron a los medios a adaptarse a las nuevas formas de comunicación desde la Casa Blanca.

Y por otro lado, el surgimiento de un movimiento dispuesto a manifestar su resistencia desde interior de la Casa Blanca y cuya herramienta de difusión es precisamente la predilecta del presidente es también el reflejo de una sociedad que cada vez más abiertamente desafía y cuestiona a sus dirigentes.

La Resistencia

En tan solo unos días, la cuenta de Twitter @RoguePOTUSStaff se viralizó. Ellos se definen como “el equipo de resistencia no oficial al interior de la Casa Blanca”.

El perfil, inaugurado el pasado 26 de enero, ya cuenta con más de 700 mil seguidores.

La cuenta, además de alentar a sus seguidores de resistir a Trump, pretende contar las intimidades de lo que sucede en la Casa Blanca y adelantar los movimientos o potenciales anuncios del presidente.

Por ejemplo el 31 de enero, @RoguePOTUSStaff adelantó que Neil Gorsuch sería la elección de Trump para llegar a la Suprema Corte de Justicia.

También dio a conocer detalles más simples, como el de una reunión de gabinete en la que se quedaron a oscuras pues nadie sabía de dónde se encendía la luz.

En otro de los mensajes de esta cuenta se afirma que Trump habría pedido usar correos electrónicos personales para mantener el control de la información y usar las cuentas oficiales para dar una apariencia de que todo está bien.

Asimismo se filtró que Stephen Bannon, el consejero presidencial, habría alentado a Trump a ser beligerante.

A pesar de todos los datos que han revelado, aun no es posible confirmar que detrás de la cuenta estén trabajadores del gobierno estadounidense o si se trata simplemente de un esfuerzo del exterior.

El presidente del Twitter

Desde su llegada a la presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump estableció un cambio en la estrategia de comunicación desde la Casa Blanca. Las clásicas conferencias o mensajes de prensa pasaron a segundo término.

Es evidente que Trump se siente más cómodo informando sus decisiones de gobierno a través de Twitter, pero no solo eso, por este medio también establece sus objetivos, responde a sus detractores e incluso, insulta a quienes no piensan como él.

Consciente del alcance y la inmediatez de la red social, Trump y su equipo de colaboradores han hecho de su timeline la forma más recurrente para dar a conocer la información oficial sobre la Casa Blanca.

No hay uno solo de sus tuits que no se haga viral de forma casi inmediata, o que no se convierta en noticia en los principales portales y blogs alrededor del globo.

El mandatario estadounidense está utilizando el Twitter para negociar, para presionar y para marcar agenda en política interior y exterior.

Como ejemplo, la serie de tuits dirigidos al presidente de México, Enrique Peña Nieto, tras la firma de la orden ejecutiva con la que daba inicio de manera formal a la construcción el muro.

Esa misma noche, Peña Nieto dio un mensaje lamentando el decreto, y reafirmando que México no habría de pagar tal muro.

En las primeras horas del siguiente día, previo a la reunión bilateral ya pactada, Trump lanzó en la red social un mensaje afirmando que si México no pagaba el muro, la reunión programada sería estéril.

Horas más tarde Peña Nieto anunció la cancelación del encuentro.

En días recientes, el Twitter de Trump también ha servido para lanzar consignas en contra del Poder Judicial, por haber vetado su decreto migratorio, para lanzar amenazas veladas a Irán, o para atacar a ciertos sectores de la prensa.
Al parecer, sus propios asesores le han aconsejado alejarse de Twitter, o por lo menos dejar de usarlo de manera tan incendiaria, pero por el momento Trump no parece muy abierto a sugerencias.

Hace eco en el mundo

Cada uno de los tuits que salen de la cuenta personal de Twitter de Donald Trump cimbran el mundo, pues a través de esa red social da a conocer sus objetivos, responde a sus detractores e insulta a quienes no coinciden con él.