Castigo ejemplar para cazadores

Dos ciudadanos chinos fueron sentenciados en Tanzania a 30 años de prisión cada uno o a pagar conjuntamente una multa de 108.7 mil millones de shillings (49.7 millones de dólares), en una de las sentencias más duras relacionadas a la caza ilegal.

Según reportó el diario local The Citizen, una Corte magistrada encontró a Xu Fujie, de 31 años, y a Huang Gin, de 51, culpables de poseer ilegalmente 706 colmillos de elefante. 

Cada uno tendrá que pagar casi 25 millones de dólares o enfrentarse a tres décadas completas tras las rejas. 

La sentencia de ambos es la última en una serie de duros juicios en Tanzania, en donde varios chinos y tanzanos han recibido largas condenas, lo que parece ser una “motivación anti-caza renovada”, apuntó el diario. 

Según los abogados acusadores Faraja Nchimbi y Paul Kadushi, entre diciembre de 2010 y diciembre de 2013, un total de 892 elefantes fueron cazados furtivamente en los parques nacionales de Tanzania. Los acusados son, dijeron los letrados, responsables de un cuarto de todos los paquidermos asesinados en el país entre 2010 y 2013. 

Nchimbi expresó a la Corte que existían suficientes razones para creer que los dos chinos eran los líderes y financiadores de una banda de caza furtiva de elefantes en Tanzania.

El lucrativo mercado negro en Asia del colmillo de rinoceronte y marfil de elefante, utilizados en la medicina tradicional, es señalado como el culpable del reciente boom en la caza furtiva a lo largo del continente africano.