Walmart: después de la tormenta

La minorista tuvo un buen manejo de crisis ante las exigencias de sus trabajadores que amenazaron con irse a huelga esta semana. El acuerdo le permitirá a la empresa mantener su reputación sin dañar sus finanzas

Walmart de México cedió ante la amenaza. Pero esto le permitió demostrar que cuenta con un buen manejo de crisis empresarial, luego de que la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) anunció su intención de irse a huelga el 20 de marzo si no se realizaba un aumento salarial de 20 por ciento más un 4 por ciento en bonos de productividad a sus trabajadores en el país.

La jornada laboral de más de ocho horas, el no tener acceso a un seguro social, los despidos injustificados y la falta de oportunidad para tener un crédito de Infonavit, fueron algunas de las demandas que más de ocho mil empleados en 132 tiendas de autoservicio, exigieron a la compañía internacional.

Ante el panorama que este conflicto representaba para su imagen, Walmart México se abstuvo de dar una respuesta durante los primeros días, sin embargo, y debido a que la fecha de las protestas se acercaba, accedió a dar como solución un aumento salarial promedio de 5.5 por ciento, dependiendo de los diferentes formatos de negocio en las más de dos mil 400 tiendas existentes en el país.

Respecto al pago de los bonos de productividad, estos se verán reflejados conforme a los resultados de la compañía, ya que se consideran un reconocimiento.

Gabriela Buenrostro, subdirectora de Comunicación Corporativa de Walmart México y Centroamérica, declaró que para la minorista reinvertir en la compensación de los asociados es fundamental y 92 por ciento del personal recibió un bono de productividad, basado en los resultados positivos de la cadena de tiendas durante 2018.

92
por ciento del personal recibió un bono de productividad en 2018

“Nuestro compromiso es seguir generando ahorros para poder reinvertir en salarios y otros temas estratégicos”, detalló la subdirectora de Walmart México y Centroamérica en un comunicado.

Reporte Índigo solicitó a la empresa los detalles del acuerdo alcanzado con sus colaboradores, pero hasta el cierre de esta edición no se tuvo respuesta.

Imagen, el gran reto

Fernando Tapia, director de la Escuela de Negocios del Tec de Monterrey, Campus Toluca, asegura que para una compañía como Walmart México este ajuste al sueldo de sus trabajadores no representa un problema, ya que en tan sólo un año ha reflejado 108 por ciento de crecimiento en sus ventas anuales.

“No es un incremento tan alto de acuerdo con el ajuste inflacionario anual. Lo convenido se encuentra por encima de la inflación que al cierre de febrero se ubicó en 3.94 por ciento”, explica el académico.

Contrario a lo que esta situación muestra, la resolución de este conflicto ayudó a estabilizar las acciones del gigante minorista, ya que al cierre de la sesión del viernes registraron una ganancia de 0.77 por ciento, a 51.10 pesos por papel, de acuerdo con la BMV

Fernando Tapia plantea que si la huelga en todo el país hubiera ocurrido, Walmart registraría pérdidas importantes en un día, y aunque este factor pareciera lo más preocupante, no lo es, ya que el mayor daño para la compañía sería en su reputación.

Si las ventas de la cadena reportaran una caída, el mercado no la vería tan atractiva para invertir y se repetiría el efecto que ocurrió durante el conflicto, debido a que en tan sólo unos días sus acciones cayeron cinco por ciento.

“A Walmart no le conviene que haya rotación de personal constantemente, pues tiene que invertir en capacitaciones y pierde mucho tiempo para que los empleados hagan bien su trabajo. Le favorece mantener la confianza y un ambiente en donde se genere lealtad por parte de sus colaboradores y clientes”.

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