Trump representa el declive del ‘imperio estadounidense’, asegura Krugman

El Nobel de Economía asegura que Trump ha contribuido en acelerar el declive de EU. En 2030, China podría tener mayor influencia global en materia económica y militar

Paul Krugman, Premio Nobel de Economía 2008, asegura que aunque no es la única razón, Donald Trump es uno de los responsables del declive de la potencialidad económica de Estados Unidos, ante un creciente fortalecimiento de China, quien en algunos años podría superarlo en influencia global.

El economista egresado de Yale, apuntó que a Estados Unidos lo distinguía una serie de valores, el ser el faro de la democracia para otras naciones, los Derechos humanos y que eran el sitio que mucha gente veía como un ideal.

“Hoy tenemos en el poder a un autoritario incapaz de controlar sus impulsos -dijo Krugman en entrevista con Forbes-, ¿qué ideales defiende Estados Unidos a estas alturas? Incluso si cierras un trato con Estados Unidos, ¿qué beneficio tendría si esta administración gusta de romperlos a capricho? La influencia de Estados Unidos en el mundo ha mostrado un gran declive”.

En contraste con el declive estadounidense, estimó que China es un “nuevo súper poder” que surge en medio de los problemas económicos propios de Europa y Estados Unidos, bloques que se pensaba hace una década, podrían impulsar una agenda en común pra crear un mundo “más seguro y decente”.

La influencia global de China, sin embargo, sería contraproducente por el egoísmo que caracteriza al país asiático. “¿Cuáles son los ideales de China? No les interesa nada excepto China, así que es un peor mundo de lo que esperaba”, agregó el Nobel.

Las conclusiones de Krugman coinciden con las del historiador Alfred W. McCoy. Se estima que en 2030, China haya superado a Estados Unidos en influencia militar y económica. Lo anterior, tuvo uno de sus primeros detonantes, la invasión de Irak en 2003; y, en la actualidad, Trump ha contribuido para acelerarlo, de acuerdo con ambos autores.

Krugman califica a Trump como una persona que no tiene respeto por la democracia ni por la libertad de expresión. “Él tiene un instinto autoritario, pero también es incompetente, su malicia es moderada por su incompetencia”, aseveró el economista.

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