T-MEC continua en el limbo sin ratificación

05 de Dic, 2019

Una vez más, México está en medio. El país fue el primero en ratificar el T-MEC y durante la renegociación del documento la delegación azteca accedió a las peticiones de sus socios. Sin embargo, hoy el gobierno mexicano se encuentra presionado por nuevas exigencias.

Desde las mesas de trabajo, el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá generó polémica, ya que a la comitiva mexicana se le pidieron adecuaciones importantes en materia laboral y en el sector automotriz, mientras que Canadá sacrificó a sus productores de leche para evitar una guerra comercial con el inquilino de la Casa Blanca.

Analistas coinciden en que México ha seguido al pie de la letra las solicitudes de sus contrapartes, hecho que le valió convertirse por primera vez en la historia en el primer socio comercial de Estados Unidos durante el primer cuatrimestre de 2019, con un comercio superior a 203 mil millones de dólares, por arriba de Canadá. Uno de los factores que influyeron en esto fue la disputa arancelaria del gobierno estadounidense con el chino.

203 mil

Hasta hace unos meses, la ratificación del tratado por parte de los dos miembros restantes parecía que se encaminaba a buen puerto, pero la nación de la hoja de maple y del Tío Sam se enfrentaron a problemas internos que han retrasado este proceso.

El documento pretende sustituir al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y a 26 años de su entrada en vigor ha permitido la comercialización de millones de productos y servicios.

Hasta 2017 se alcanzó un flujo comercial de 2.2 billones de dólares entre la región de Norteamérica, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Economía.

Jorge Sánchez, director del Programa de Investigación Aplicada de la Fundación de Estudios Financieros (Fundef), considera que en este momento las probabilidades para ratificar el documento son escasas y el escenario para el próximo año luce similar.

“Esta renegociación ha sido un verdadero dolor de cabeza y si no se dan las condiciones una alternativa sería cancelarlo y que México acuda ante la Organización Mundial del Comercio a iniciar un proceso legal”, comenta el experto.

26

Sin embargo, Sánchez explica que esto provocaría una respuesta contraria con el presidente Donald Trump, quien en su descontento tomaría medidas que al final terminarían afectando más a la economía mexicana.

En caso de que no se apruebe el acuerdo antes de que termine este año, la labor para el Congreso estadounidense sería mucho más complicada, ya que las campañas presidenciales tendrán toda la atención desde inicios del 2020.

Trabas al T-MEC injustificadas

En este momento el principal freno para que Estados Unidos ratifique el tratado es la presión que está ejerciendo hacia México por el tema laboral. La Casa Blanca solicitó vigilar la aplicación de la reforma laboral aprobada durante este año, petición que ya fue rechazada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Un punto que Jorge Sánchez destaca es que la Cuarta Transformación ha defendido al T-MEC, a pesar de que va en contrasentido de la retórica neoliberal, pues el acuerdo promueve el libre comercio.

Aunque por ahora es incierto saber si se cumplirán con lo tiempos establecidos para el director del Programa de Investigación Aplicada de Fundef existen motivos de mayor preocupación.

México ha puesto todo de su parte para que el T-MEC salga adelante, pero hay muchos intereses detrás que quieren echar para atrás este acuerdo y tienen su origen en Estados Unidos. El discurso anti México es delicado porque están relacionados factores económicos muy importantes