El club de los vulnerables

Después de la volatilidad veraniega que azotó a los mercados financieros del mundo, un periodo de relativa calma parece estarse instalando. Sin embargo, expertos siguen manteniendo en la mira vulnerabilidades que podrían descarrilar esto.

En particular, el banco HSBC destacó en un reporte reciente tres grandes tendencias que representan amenazas potenciales para la estabilidad financiera y crecimiento económico del mundo.

Indigonomics Staff Indigonomics Staff Publicado el
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Precios históricamente altos para ciertos activos, junto con un alto nivel de endeudamiento son destacados como factores de riesgo alimentados por las actuales políticas monetarias
“Los pronosticadores pasan gran parte de su tiempo afinando sus proyecciones centrales. Pero a veces al concentrarse en el panorama más probable para el crecimiento perdemos de vista vulnerabilidades que se están acumulando”
James PomeroyEconomista global en HSBC

Después de la volatilidad veraniega que azotó a los mercados financieros del mundo, un periodo de relativa calma parece estarse instalando. Sin embargo, expertos siguen manteniendo en la mira vulnerabilidades que podrían descarrilar esto.

En particular, el banco HSBC destacó en un reporte reciente tres grandes tendencias que representan amenazas potenciales para la estabilidad financiera y crecimiento económico del mundo.

Éstas son debilidad en Asia (principalmente China), burbujas en mercados desarrollados como Canadá y Suecia, y el continuo declive en los precios de las materias primas (commodities) que representan el principal producto de exportación de diversos países emergentes.

Pero aunque la lista de países afectados por estas tendencias afecta tanto a mercados desarrollados como emergentes, no todos se ven igual de amenazados por estas vulnerabilidades.

Debilidad asiática

Últimamente China, la segunda mayor economía del mundo, ha agregado un preocupante producto a sus exportaciones: problemas económicos.

La desaceleración económica de China, que se prevé registre su menor nivel de crecimiento en un cuarto de siglo durante este año, ha resultado en declives en los precios de las materias primas que son los principales productos de exportación de la mayoría de los mercados emergentes.

Esto ha resultado en fuertes fugas de capital, depreciaciones de sus divisas y encarecimiento del crédito para estos países, particularmente aquellos que están más expuestos al comercio con China. HSBC destaca en particular los casos de Malasia e Indonesia, ambos exportadores fuertemente vinculados con China.

James Pomeroy, economista global de HSBC, señala que “la baja en los indicadores chinos ha golpeado la confianza (…), poniendo en riesgo la sustentabilidad de la deuda del sector corporativo” de estos países, y podrían resultar en una nueva crisis crediticia para la región.

Burbujas desarrolladas

Los mercados desarrollados podrán no estarse enfrentando a fugas de capital, pero tienen sus propios problemas financieros que preocupan a HSBC.

Niveles de precios históricamente altos para activos como las acciones y las propiedades inmobiliarias, junto con un alto nivel de endeudamiento en los hogares de estos países son destacados como factores de riesgo.

En parte estas situaciones han sido alimentadas por las políticas de los bancos centrales de estos países, que reaccionaron a la crisis del 2008 recortando sus tasas de interés a niveles sin precedentes.

Expertos advierten que estas tasas ultrabajas pueden estar creando burbujas financieras al incentivar a los inversionistas a tomar más riesgos especulativos en busca de mejores rendimientos.

En consecuencia, si sus bancos centrales no suben sus tasas de interés podrían seguir incrementando estos riesgos, pero si se deciden por un alza podrían causar volatilidad financiera o incluso una recesión en sus países.

Commodities en declive

Los problemas causados por el declive de las materias primas (commodities) no se limitan a Asia, ya que aquellos países cuyas exportaciones dependen por lo menos en 50 por ciento de estos productos se ven expuestos a desbalances y choques externos que pueden resultar en una crisis.

Ejemplos de esto pueden verse en mercados emergentes como Colombia, Chile, y Sudáfrica, así como en mercados desarrollados como Canadá y Noruega. 

Pero los dos países más afectados siguen siendo Brasil y Rusia, ambos de los cuales se encuentran en recesión.

Para México, que ha diversificado sus exportaciones hacia la manufactura y que depende menos de China que de Estados Unidos para su actividad comercial, el hecho de que los precios de los commodities se encuentren cercanos a su punto más bajo desde 1999 no resulta tan preocupante.

Sin embargo, la falta de una recuperación en los precios petroleros sí presiona al país, ya que un tercio de las finanzas públicas federales sigue dependiendo de la venta de crudo y los menores precios disminuyen el interés de las empresas por las licitaciones de la reforma energética.

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