El tercer DLC para dar inicio al segundo año de contenido en Assassin's Creed Valhalla ya llegó con una aventura mítica, literalmente.
Un nuevo contenido para la más reciente entrega de la saga de los asesinos se ha lanzado. Assassin’s Creed Valhalla: Dawn of Ragnarök es una auténtica saga vikinga llena de acción fantástica. Eivor comenzó su viaje en Noruega, de ahí pasó a Inglaterra, Irlanda, Terranova, Francia; ciertamente una persona de mundo. Pero durante sus travesías, Eivor también tuvo una serie de visiones sobre los dioses nórdicos, los aesir. En Dawn of Ragnarök, Eivor no viajará a ningún lugar de esta tierra llamada Midgard, sino visitará el mundo de los enanos, Svartálfaheim.
Eivor de nueva cuenta se meterá en la piel de Havi, quien a su vez es el mismísimo Odín, padre de todos los dioses. Surtr, el gran líder de los gigantes de fuego y soberano de Muspelheim, ha secuestrado a Balder, hijo de Odín. Así pues, Odín y Frigg, la madre de Balder, van en busca de su hijo a Svartálfaheim, el reino de los enanos. Lo que no saben es que el rapto de Balder estaba predestinado y así comienza el Ragnarök, el fin del mundo.
¡Saludos, desde Svartálfaheim!
Esto apenas es el preludio para Dawn of Ragnarök y la verdad es que las expectativas, a nivel narrativo, se cumplen. Este nuevo DLC es todo un deleite y goce para los entusiastas de la mitología nórdica. La historia comienza cuando Havi y Frigg llegan a Svartálfaheim desesperados por encontrar a su hijo Balder. Sin embargo a su llegada, los dos aesir son testigos de la devastación en el reino de los enanos. Surtr y su hueste de muspelianos han sometido a los enanos, obligándolos a refugiarse en escondites secretos. Odín debe ir de refugio en refugio para hablar con diferentes personajes, encontrar a su hijo y averiguar por qué Surtr está en Svartálfaheim.
La historia de Dawn of Ragnarök está muy bien estructurada. Los conocedores de esta mitología sabrán exactamente a dónde va todo desde el principio pero al mismo tiempo la narrativa puede llevar de la mano a cualquiera no tan entendido. Se nota bastante que Ubisoft se documentó en las sagas vikingas para crear este DLC. Incluso hay, como buen contenido actual de Assassin’s Creed, una buena cantidad de tareas secundarias que complementan la historia.
Sin embargo, en este apartado hay una cuestión imposible de ignorar. Dawn of Ragnarök es tan bien logrado como ajeno al universo de los asesinos. A este punto, después de varios juegos y DLCs esto ya no es para nada nuevo. Pero mientras sigan estrenándose títulos con la leyenda ‘Assassin’s Creed’, la espinita perdurará. ¿Dónde quedó el credo de los asesinos? ¿Qué pasó con la milenaria lucha entre asesinos y los templarios?
Havi, el cambia formas
Dawn of Ragnarök tamibén presenta nuevas mecánicas de juego así como nuevo equipamiento. Eivor/Havi consigue el conjunto de armadura Atgeir que otorga ciertas bonificaciones de combate. Sin embargo lo verdaderamente innovador en Dawn of Ragnarök es el brazalete Arrancahugr. Este artefacto, fabricado por los enanor para Havi, tiene la capacidad de drenar la energía de enemigos caídos. Esta nueva mecánica presenta habilidades nunca antes vistas. Ahora Havi puede transformarse en un muspeliano para pasar desapercibido y caminar por lava. El Arrancahugr también tiene la capacidad de convertir a Havi en cuervo para facilitar el reconocimiento del mapa.
Estas dos habilidades son unas de varias que el Arrancahugr presenta en este nuevo DLC. Aunque se agradece el intento por presentar algo diferente, la realidad es que estas nuevas mecánicas flaquean por dos cosas. En primer lugar, salvo en situaciones específicas de las misiones, estas habilidades rápidamente se vuelven olvidables. En segundo lugar y ligado a lo primero, llegado a este punto Eivor/Havi es un arsenal andante a niveles excesivos. Habilidades pasivas, activas, armas de todo tipo y ahora el Arrancahugr; son demasiadas herramientas disponibles al mismo tiempo que hace imposible poder aprovechar todas.
Por el lado de las misiones lo mismo. Ubisoft no se desvía ni un poco de la fórmula desde hace tres entregas. Desde que Asassin’s Creed se volvió de mundo abierto, las misiones se han transformado en hacerlas de mandadero. Ir con fulano para dar con el paradero de Balder, luego éste te dirá que él no sabe pero zutano sí y está en el otro refugio. Zutano accederá a ayudarte con la condición de conseguir equis objeto y así sucesivamente. En algunos puntos hay batallas contra jefes y esas sí están bien logradas; el problema está en llegar a esas batallas..
Una belleza de otro mundo
Sin dudas, donde más brilla Dawn of Ragnarök es en su apartado estético. Desde el inicio de esta nueva trilogía con Assassin’s Creed Origins, Ubisoft le dio un giro de enfoque a la saga. Ahora, entrega a entrega se nos muestran mundos con lujo de detalle y este DLC no es la excepción. Dawn of Ragnarök logra exitosamente crear un escenario vasto y sumamente trabajado pero al mismo tiempo fantástico. Verdaderamente Svartálfaheim es algo nunca antes visto en toda la saga y en un muy buen sentido. Por extraño que suene, este DLC logra capturar la estética enana, al menos como suele concebirse en otras obras de ficción. Junto a las imponentes estructuras enanas está la devastación provocada por Surtr. Ríos de lava burbujeantes contrastan en un paisaje de piedra y pastos.
Los personajes también son todo un deleite a la vista. Enanos, jotun, muspelianos y todas las criaturas salvajes encontradas en Svartálfaheim. Pero sin dudas quien se roba completamente los reflectores es el mismo Surtr. El diseño del líder de los gigantes de fuego es simplemente excepcional. Surtr, de proporciones enormes, deja a Havi como insignificante. Pelear contra él definitivamente es más gratificante por el excelente diseño logrado.
Calificación: 7.5
Dawn of Ragnarök es un muy buen DLC para Assassin’s Creed Valhalla. Sin embargo esta entrega se siente un poco fuera de lugar. El apartado estético y el diseño de mundos es absolutamente sorprendente pero no compensa lo suficiente. La narrativa es disfrutable sobre todo para los entusiastas de la mitología nórdica pero ajena a la esencia de Assassin’s Creed. A nivel de gameplay, este DLC busca aportar cosas nuevas pero terminan diluyéndose en la inmensidad de lo ya existente. Ubisoft ha perfeccionado en los últimos años su capacidad de crear mundos sorprendentes, carentes de identidad e historia atrapante.
El DLC Dawn of Ragnarök es contenido desarrollado y distribuido por Ubisoft, quien proporcionó la copia para hacer esta reseña.
