Tarjeta amarilla a la pirotecnia
Tras lo sucedido con Jürgen Damm y Lucas Viatri, los clubes recomendarían no usar explosivos
Indigo StaffUna nueva recomendación estaría por aparecer en los reglamentos de varios equipos de futbol, no solo de México, sino de otros países, tras lo sucedido en esta Navidad y Año Nuevo.
Los clubes analizan sacar una “tarjeta amarilla” al uso de fuegos pirotécnicos y en algunos casos prohibir esto a sus jugadores luego de los casos de Jürgen Damm y Lucas Viatri.
Ambos futbolistas sufrieron lesiones tras haber estado encendiendo fuegos artificiales en sus vacaciones decembrinas.
El caso del argentino Viatri fue el más delicado. El jugador del Peñarol sufrió quemaduras de tercer grado en su rostro el pasado 24 de diciembre y no se sabe cuándo volverá a la actividad.
“Viatri tuvo una lesión bastante severa en el ojo izquierdo. Está evolucionando en forma favorable, pero hay que ser cautos. No hay fecha definida para su regreso”, comentó Edgardo Rienzi, médico del Peñarol.
Esta situación incluso podría traerle consecuencias al delantero argentino, quien tendría problemas en un ojo.
“Nosotros no podemos asegurar que recupere la totalidad de la agudeza visual del ojo izquierdo, a partir de la hemorragia que todavía subsiste”, añadió el médico Rienzi.
DAMM, FUERA DOS SEMANAS
En nuestro país, los Tigres, vigente campeón de la Liga MX, no podrán contar en al menos las dos primeras jornadas del torneo con Jürgen Damm.
El también seleccionado mexicano estará dos semanas fuera de actividad tras haber sufrido quemaduras de primer grado en su rostro por la explosión de un cohete.
2
En redes sociales circuló una fotografía del jugador felino tras haber sido atendido por este incidente.
Este par de situaciones habrían alertado a otros clubes para hacer una recomendación a sus elementos, a quienes se les pediría se abstengan de encender fuegos pirotécnicos y realizar actividades que puedan poner en riesgo su salud, algo que ya existe en los reglamentos internos de los equipos.
En el futbol europeo, en el 2011, existió el caso de Mario Balotelli, quien quemó su casa de Manchester por jugar con pirotecnia, aunque resultó de cualquier quemadura.
