Pasó de improvisado a técnico campeón

Robert Dante Siboldi llegó a Santos de manera improvisada tras la salida de José Manuel de la Torre, pero esa decisión apresurada por parte de la directiva de los Laguneros ahora está viendo sus mejores resultados, al conseguir su sexta estrella de campeón bajo el mando del uruguayo.

Siboldi tomó las riendas de La Comarca sin ninguna experiencia como entrenador de primera división más que la de interino, pero llegó al banquillo con una fórmula que le ayudó a lucir durante todo el torneo: pulir a jugadores que habían pasado a segundo plano en la Liga MX.

Debido a que el presupuesto en Santos para gastar en refuerzos era poco para este torneo, Siboldi decidió apostar en jugadores que ya habían probado ‘las mieles del triunfo’ en otros equipos para transformarlos en su pilares, y por tal motivo convirtió a Nestor Araujo, Brian Lozano, Osvaldo Martínez, Jonathan Orozco, José Juan Vázquez y Javier Cortés, en sus referentes en esta campeonato.

El exportero aseguró que por las adversidades de todo el Clausura este título se tiene que disfrutar más de lo que se debe, ya que jugadores que muchos equipos daban por ‘perdidos’ fueron los que se rompieron el alma para ser campeones.

“Que lo disfruten y se sientan orgullosos de este equipo porque se partieron la madre no solamente hoy, sino durante todo el torneo y creo que es un orgullo para la gente, para la Comarca. Hoy se vieron 11 guerreros dentro del campo esté quien esté, eran 11 guerreros que dejaron todo dentro de la cancha”, dijo el técnico campeón tras finalizar el partido en el Nemesio Díez.

Orozco salda su deuda personal

La llegada de Jonathan Orozco a Santos fue criticada debido a su pasado con Rayados de Monterrey, equipo con el cual los de la Comarca Lagunera tienen rivalidad, pero el portero regio dejó de lado su papel de enemigo y desde su llegada al club santista prometió un campeonato, deuda que quedó saldada ayer por la noche.

Aseguró que más allá de cumplir su palabra con el club, este campeonato le sirvió para sacarse la espinita de haber perdido una final un año atrás con los regios.

“He tenido muchas (noches buenas), pero esta la he disfrutado como nunca. Después de un largo tiempo y ser campeón, volver a serlo es algo muy bonito. Tenía una revancha, una espina clavada que era perder una Final y me había dolido en el alma, pero gracias a Dios la pude sacar; prometí ser campeón en cuanto llegué a esta institución y gracias a Dios lo pude lograr”, dijo.

Orozco manifestó que el actual campeonato que consiguieron ante Toluca ayudó para demostrar en todo el país, pero en especial en la zona Norte, que Santos es el mejor equipo por encima de Rayados y Tigres.