De gratos recuerdos

Los Carneros han sido un equipo nómada de la NFL, nacieron en Cleveland, luego se mudaron a Los Angeles, para 1995 se movieron a San Luis y fue ahí donde tuvieron su mejor momento en la era moderna, al ganar el Super Bowl de la temporada de 1999 en el Georgia Dome de Atlanta.

Casi 20 años después, y de vuelta en la ciudad de Los Angeles, el equipo regresa a la casa de los Halcones de Atlanta para buscar un nuevo anillo de campeón, y al igual que en la edición XXXIV estarán frente a un rival de alta complejidad.

Las similitudes de Los Carneros son varias entre el equipo actual y el de finales del milenio pasado, pues ahora cuenta con una dupla ofensiva explosiva con el quarterback Jared Goff y el corredor Todd Gurley, como en aquel entonces lo fueron Kurt Warner, quien fue el Jugador Más Valioso del año, y Marshall Faulk, quien fue el Jugador Ofensivo del Año.

Ese Super Bowl siempre será recordado por la jugada que marcó el final del partido, con el marcador 16-23 a favor de Carneros, el quarterback de los Titanes, Steve McNair, quien era un espectáculo aéreo, completó un pase con Kevin Dyson, que atrapó el ovoide en la yarda 3 y fue tacleado por Mike Jones, y aunque el receptor se estiró lo más que pudo, la punta del balón se quedó a media yarda de las diagonales y no pudo llegar el empate, pues el tiempo se terminó.

En esa ocasión, el Más Valioso del Super Bowl fue el propio Kurt Warner, al lanzar 24 pases completos, 414 yardas y dos touchdowns para conseguir su único título en la NFL, ya que en su segundo intento lo perdió contra un joven sensación, Tom Brady, dos años después.

El campeonato de la temporada 1999 también representó el primero y único en la carrera de Dick Vermeil como entrenador en jefe, ya que al siguiente año emigró a los Jefes de Kansas City, con quienes estuvo cinco campañas y se retiró en 2005.