A este medicamento se le atribuye una ralentización moderada en el ritmo del deterioro cognitivo al principio de la enfermedad. Foto: Pixabay

Aprueban en Estados Unidos medicamento que ralentiza el desarrollo inicial del alzheimer

El medicamento logró una ralentización en el declive cognitivo del 27 por ciento tras 18 meses

Este viernes, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos aprobó un nuevo fármaco para el combatir el alzheimer.

A ‘Leqembi‘ se le atribuye una ralentización moderada en el ritmo del deterioro cognitivo al principio de la enfermedad.

‘Leqembi’ representa una esperanza tras reiterados fracasos en la lucha por encontrar un tratamiento contra el alzheimer

La aprobación de ‘lecanemad‘, que se comercializa como Leqembi, ofrece a los pacientes y a los médicos una esperanza después de reiterados fracasos para encontrar un tratamiento efectivo contra el alzheimer. Sin embargo, también conlleva riesgos de hinchazón y sangrado en el cerebro.

El tratamiento sugiere que se debe administrar una infusión intravenosa cada dos semanas. Este nuevo avance científico es más prometedor que el escaso número de otros tratamientos de los que se dispone.

El medicamento logró una ralentización en el declive cognitivo del 27 por ciento tras 18 meses.

Se requieren más ensayos clínicos para comprobar la eficacia del ‘Lequembi’

La FDA rubricó el uso de Leqembi en personas con un deterioro cognitivo leve o en un estado temprano de alzheimer.

El medicamento se aprobó por vía acelerada, lo que permite un ratificación precoz que “cubra una necesidad médica insatisfecha”, de acuerdo con la agencia. 

Se requiere que las empresas que lleven a cabo ensayos clínicos adicionales y confirmen el beneficio de este fármaco o decidan retirarlo del mercado.

La FDA basó su decisión tras la tercera fase de experimentación clínica con 1.795 pacientes. En estos se observó que el medicamento, desarrollado por las compañías Eisai y Biogen, logró una ralentización en el declive cognitivo del 27 por ciento tras 18 meses. Se trata de un declive suficiente para ser perceptible en los pacientes.