El robo de gas LP en México dejó pérdidas por 13 mil 200 millones de dólares durante 2022 por la sustracción de entre 60 y 80 mil toneladas. Foto: Pexels

Robo de gas LP en México deja pérdidas millonarias en 2022

El presidente de la Asociación de Distribuidores de Gas LP, Luis Landeros, reconoció que el robo del 'huachigas' no se ha logrado detener en México

En el Congreso de la Asociación Iberoamericana de Gas, el presidente de la Asociación de Distribuidores de Gas LP (ADG), Luis Landeros, reconoció que el robo del ‘huachigas‘ no se ha logrado detener en México, esta práctica ilícita le cuesta a Petróleos Mexicanos (Pemex) mil 100 millones de pesos al mes.

El robo de gas LP en México dejó pérdidas por 13 mil 200 millones de dólares durante 2022 por la sustracción de entre 60 y 80 mil toneladas.

Luis Landeros externó su preocupación porque las tomas clandestinas, robo de pipas, venta en el mercado negro, cobro por derecho de piso, estaciones secuestradas por  el crimen organizado son los principales problemas a los que se está enfrentando la industria del gas LP en México.

“Desgraciadamente sigue creciendo y es un tema que nos preocupa mucho porque el huachigas, ese gas que saca de los ductos y que se saca del robo de unidades para poder distribuirse, requiere de autotanques, requiere de semirremolques y pipas, y lo que sucede es que se roban los equipos a las empresas y son los que usan para distribuir todo el gas que robado”, dijo Luis Landeros.

“Nosotros estimamos que por la cantidad de toneladas que se están dejando de comprar a Pemex, porque están en el mercado ilícito, estamos hablando de mil 100 millones de pesos mensuales; no solo no se le paga a Pemex, sino que no paga impuestos de ningún tipo y tampoco paga regulaciones ni paga derechos”, explicó.

El gas LP que se distribuye en el centro del país proviene del ‘huachigas’

Luis Landeros comentó que el comercio formal disminuyó derivado de la venta ilegal de gas LP, pues al ser más barato no puede competir con el que ofrecen las empresas establecidas de manera legal. Esto impacta en las ventas de mayor consumo energético como lo es la zona metropolitana del Valle de México.

De acuerdo con datos de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), hay por lo menos 50 estaciones de carburación en la Ciudad de México y 350 en el Estado de México que operan con legalidad, no obstante, operan 800 y 850 estaciones y el 60 por ciento de estas operan sin regulación.

El robo de gas LP se concentra en el llamado Triángulo Rojo, conformado por los estados de Puebla, Tlaxcala, Hidalgo y Estado de México.

“Estamos hablando de que entre el 15 y 20 por ciento de la distribución en el centro del país es lo que representa el volumen de gas ilícito”, asegura Luis Landeros.

Luis Landeros hizo un llamado a la CRE, a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), a la Guardia Nacional (GN) y las autoridades locales para llevar a cabo operativos que permitan verificar la legalidad de los centros de carburación. 

Añadió que, algunas estaciones de distribución han tenido que ser cerradas por las amenazas del crimen organizado, mientras que otras han sido secuestradas con el fin de operarlas como propias.

“Es algo que se se está extendiendo en varias partes del país, lo que pasó en Zihuatanejo no es el único lugar en el que ha ocurrido, tenemos en varias partes porque el crimen organizado agarra el control de un flujo de dinero importante, como lo es el mercado ilícito, llegan y dicen, ‘o me compras gas o me dejas la planta y yo me encargo’, ese tipo de cuestiones nos obliga a cerrar plantas completas”, comentó el presidente de la ADG.