
Conflicto entre Israel y Hamás no ha afectado el flujo de petróleo, afirma AIE
En su informe mensual, la AIE da a conocer que hasta el momento el conflicto entre Israel y Hamás no ha afectado los flujos de petróleo, pero sí ha provocado una inflexión y un repunte de precios Ann VenturaLa Agencia Internacional de la Energía (AIE) subraya que el conflicto entre Israel y Hamás no ha afectado por ahora a los flujos de petróleo, aunque sí ha provocado una inflexión y un repunte de precios, y va a centrar la atención de los mercados en el futuro inmediato.
En su informe mensual sobre el mercado petrolero, la AIE no modifica esencialmente su previsión de un mercado equilibrado, pero advierte de que “la comunidad internacional seguirá centrada en los riesgos para los flujos” en Oriente Medio, que suponen más de un tercio del tráfico marítimo mundial de petróleo.
El conflicto entre la milicia palestina e Israel “no ha tenido ningún impacto directo en los flujos de petróleo”, pero también que su desencadenamiento supuso un aumento inmediato de 4 dólares por barril en el mercado de futuros del Brent y que hay gran incertidumbre sobre lo que podría ocurrir.
AIE asegura que seguirá vigilando de cerca el mercado y “como siempre, está dispuesto a actuar en caso necesario” para garantizar un abastecimiento suficiente.
AIE estima una ligera alza en sus previsiones sobre consumo mundial de petróleo
Más allá de las dudas sobre los efectos de esta nueva crisis en Oriente Medio, los expertos de la agencia revisan ligeramente al alza sus previsiones sobre el consumo mundial de petróleo para este año hasta una media de 101,9 millones de barriles diarios, lo que significa 100.000 barriles diarios más de lo que habían anticipado el mes pasado.
De cumplirse, eso equivale a un incremento del consumo de 2,3 millones de barriles respecto a 2022 y China por si sola pesa un 77 por ciento de ese incremento. El resto de la subida se debe prácticamente de forma integral a otros países en desarrollo, y en particular a India y Brasil. En agosto, China absorbió una cifra récord de 16,9 millones de barriles diarios.
Según las proyecciones de la AIE, los países de la OCDE tendrán un crecimiento del consumo marginal en 2023, de 70.000 barriles diarios, antes de entrar en una fase de “declive permanente” a partir de 2024, cuando se espera una caída de 380.000 barriles.
Para el conjunto del mundo, la demanda de crudo el año próximo tendrá un aumento de 880.000 barriles diarios, frente al alza de 990.000 barriles que se había anticipado en septiembre, lo que se debe esencialmente al mayor incremento en 2023.
Por lo que respecta a la oferta, la AIE espera que este año progresará en 1,5 millones de barriles diarios y otros 1,7 millones en 2024 aportados esencialmente por países que no pertenecen al cártel formado por la OPEP y sus socios.
En 2023, Estados Unidos aportará 1,3 millones de barriles diarios adicionales. En 2024, el país será el gran protagonista, junto con Brasil, Guyana y Canadá aportarán un 65 por ciento de esos 1,7 millones de barriles adicionales, explica la agencia EFE.