Una nueva versión de Venecia, la ciudad italiana flotante, está por alzarse en Londres en el muelle industrial Royal Victoria Dock, al este de la capital británica.
Se trata del ambicioso proyecto anunciado por el alcalde de Londres, Boris Johnson, en el marco de la convención anual de inversión inmobiliaria, Mipim, donde dijo que espera sacar provecho del periodo postolímpico y reactivar la economía de Reino Unido y la capital londinense que hoy se encuentra “en lo más alto de las listas de los inversionistas”.
Eugenia Rodríguez