
Los altos jerarcas del PAN amanecen hoy con el dilema de convalidar o no la elección presidencial.
Y es que tanto la candidata Josefina Vázquez Mota como el presidente Felipe Calderón, sin dejar a un lado al líder nacional Gustavo Madero, ya aceptaron que se dio inequidad. Que el PRI gastó de sobra y que abundan las ilegalidades.
Hasta ahí todo va sobre ruedas. El problema viene cuando dicen que no le quieren engordar el caldo a Andrés Manuel López Obrador demandando la nulidad de la elección. Aunque existan razones.