El PAN de Nuevo León arrancó ayer su juego interno por la renovación de su dirigencia.
Y sólo se centra en dos jugadores: Tere García de Madero, exalcaldesa de San Pedro, y Mauro Guerra Villarreal, exsecretario general de este partido.
Ambos representan a diferentes corrientes hacia el interior de Acción Nacional.
Guerra Villarreal es apoyado por la neocúpula del PAN local, liderada por el senador Raúl Gracia, Seferino Salgado con su Grupo San Nicolás, y José Serrano Montoya con una parte de la División del Norte.
Jesús Padilla