Termina el edén petrolero

02 de Jul, 2017

Ninguna de las empresas que se han acreditado las licitaciones de Pemex en Tabasco contrata directamente a los obreros

“Lo verdaderamente difícil es pagar las cuotas extraoficiales que se cobran”

A causa de la subcontratación, la corrupción sindical y las restricciones económicas de Petróleos Mexicanos (Pemex), el que una vez fue considerado como el edén petrolero en Tabasco está a punto de desmoronarse.

El desempleo y la desesperanza entre los trabajadores del sector van en aumento. Atrás quedó la época en que ser trabajador petrolero era el máximo aspiracional para la clase obrera en esta entidad.

En Tabasco se estima la perforación de 45 de los 150 nuevos pozos petroleros programados para este año en todo el país, pero la contratación de trabajadores locales se finca ahora en convenios laborales de corto plazo.

“A lo mucho que aspiramos ahora es a tener un contrato temporal que puede ser de seis meses, dos semanas, o de hasta un día”, dijo Eduardo, un trabajador que luego de cinco contratos consecutivos de tres, ocho, 30, cuatro y dos días, ahora aspira a firmar un contrato de seis meses, en donde el salario es un 40 por ciento menos que el que obtiene un trabajador de base en Pemex.

La nueva modalidad laboral que se asoma es el outsourcing, régimen que se impone en las contrataciones; ninguna de las empresas petroleras que han ganado licitaciones de Pemex para exploración, perforación y explotación de pozos petroleros en Tabasco, de acuerdo a trabajadores entrevistados, está otorgando contratos laborales de base.

Eso afecta directamente en las percepciones de los asalariados, quienes primero deben pasar por la autorización de cualquiera de las 52 secciones del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), el organismo gremial que dirige Carlos Romero Deschamps, para poder aspirar a la subcontratación.

Cuotas extraoficiales

Lo difícil no es contar con el aval del sindicato petrolero, para poder ser empleado en cualquiera de los nuevos proyectos petroleros puestos en marcha en esta entidad, explicó Eduardo, quien solicitó la omisión de sus apelativos por miedo a las represalias. “Lo verdaderamente difícil es pagar las cuotas extraoficiales que se cobran”, detalló, para las dirigencias de las secciones sindicales para contar con ese aval.

En la zona de Comalcalco, en donde el control gremial de los petroleros está en manos de la sección 29 del STPRM, a cargo de Eduardo Alain Rojas Cobos, el sindicato cobra entre 15 mil y 35 pesos a cada trabajador que busca el respaldo del sindicato para acceder a un contrato temporal.

Las plazas laborales permanentes se tazan en el pago de cuotas a sindicato que van desde los 50 mil a los 120 mil pesos.

Reporte Indigo buscó la versión del líder sindical Rojas Cobos, quien sólo atiende un día a la semana los asuntos del gremio en sus oficinas sindicales, pero se negó bajo el argumento de “lo saturado de la agenda de audiencias con contratistas de nuevas inversiones”.

De acuerdo a versiones de trabajadores, también las dirigencias sindicales de las secciones 14 de Ciudad Pemex, 44 de Villahermosa, y 50 de Dos Bocas y Paraíso, están aplicando estos cobros.

En Tabasco se cuentan por cientos los empleados de Pemex que han sido liquidados y obligados a la contratación temporal en empresas privadas con nuevos proyectos de hidrocarburos en la zona, lo que ha impactado en la economía local.

Se estima que la renta inmobiliaria cayó en un 45 por ciento en los últimos 6 meses y las inscripciones en escuelas particulares disminuyó un 30 por ciento, en el mismo periodo.

Pensiones y jubilaciones para los amigos

La mala situación económica de Pemex es uno de los argumentos que el sindicato petrolero refiere al justificar la recomendación obligatoria para quienes buscan una contratación, aunque sea temporal.

Y cómo no va a estar en malas condiciones económicas si, de acuerdo a la última revisión a los estados financieros hecha por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), Pemex tiene un déficit económico de más de un billón 474 mil 088 millones 528 mil pesos, a causa de jubilaciones y beneficios post-mortem otorgados hasta el 2014.

De acuerdo a los datos más recientes de la ASF, hasta el 2014 la población de jubilados y beneficiarios post-mortem de Pemex era de 104 mil 919 personas, un 81.7 por ciento de la población de trabajadores activos, misma que hasta el 2015 era de 128 mil 445 trabajadores, es decir, Pemex paga a trabajadores inactivos casi la misma cantidad que paga a su planta laboral activa.

El origen de esa irregular situación, reconoce la ASF, se debe al uso de la figura de jubilaciones de “trabajadores transitorios”, aquellos que, aun cuando sólo tengan unos meses de trabajo en Pemex, pueden reclamar el derecho a la jubilación tomando en cuenta los años de servicio que prestaron en otras dependencias federales.

Esa situación se permite por acuerdo de Pemex y el Sindicato Petrolero, de conformidad con lo señalado en las cláusulas 20 y 21 del Contrato Colectivo de Trabajo (CCT), y en los artículos 85 y 86 del Reglamento de Trabajo de Personal de Confianza (RTPC).

Esto ha derivado en la incapacidad económica de Pemex para contratar nuevos trabajadores, consideran los empleados.

“No se da la posibilidad de nuevas contrataciones en Pemex, obligándonos a la subcontratación en alguna de las empresas ganadoras de licitaciones petroleras”, explicó Luis Antonio, quien lleva casi dos años a la espera de un contrato temporal.

Entre amigos

La figura de trabajadores transitorios para el régimen de jubilaciones afecta a Pemex:

>> 8,501

Jubilados en 2014 mediante ‘convenios y acuerdos especiales’

>> 5,197

Trabajadores fueron jubilados a petición del sindicato

>> 3,304

Jubilados fueron considerados como personal de confianza

Baja oferta

Condiciones laborales para quienes buscan colocarse en Pemex:

>> 15

Empresas de outsourcing operan en Tabasco para las trasnacionales con licitaciones en Pemex

>> 5,000

A 8,000 pesos semanales el salario promedio de un obrero contratado por Pemex

>> 3,000

A 5,000 pesos quincenales el salario promedio de un obrero contratado vía outsourcing

Bonanza para las transnacionales

A la fecha, las empresas Roma Energy Holdings, Grupo Diarqco S.A. de C.V., y Compañía Petrolera Perseus, son las que se han hecho ganadoras de las principales licitaciones de los proyectos extractivos puestos en oferta por Pemex.

Estas compañías ya han iniciado con el proceso de contratación de la mano de obra para los trabajos extractivos.

Pero ninguna de las empresas que se han acreditado los proyectos Paraíso, Mayacaste, Tejón y Fortuna Nacional contrata directamente a los obreros, se valen de la subcontratación vía outsourcing.

Las condiciones laborales que se han abierto para que se reintegren los trabajadores petroleros despedidos de Pemex, ni siquiera se aproximan a las condiciones de salario y contratación que se registran en los pozos petroleros de la paraestatal, en donde el salario promedio de un obrero oscila entre los 5 mil y 8 mil pesos semanales.

Las nuevas empresas que llegaron a Tabasco, amparadas por la Reforma Energética, están ofreciendo, siempre luego de la recomendación del sindicato petrolero, puestos laborales igual de riesgosos que en Pemex, pero a cambio de un salario que va de los 3 mil a los 5 mil pesos por quincena, sin prestaciones de antigüedad, derecho a la jubilación, pagos de periodo vacacional, ni seguros de vida.

Las contrataciones que ofrecen las empresas trasnacionales en Tabasco serán provisionales, con rangos de duración desde un día hasta tres meses.

Ninguna empresa está ofertando plazas laborales permanentes, como las que aún puede manejar en Pemex el propio sindicato petrolero.

A la par de provocar la inconformidad de los trabajadores por los salarios y tiempos de vigencia de los contratos laborales que ofrecen, las nuevas empresas de hidrocarburos que han llegado a Tabasco anuncian inversiones de más de 4 mil 500 millones de dólares, y la generación de más de 17 mil empleos directos que ayudarán a la generación de 2 millones de barriles de petróleo crudo al mes.