Quitados de la pena

Por allá en Guerrero parece que los perredistas no entienden que deben darle una buena lavada a su imagen en aquel estado, luego de lo ocurrido en Iguala hace casi siete meses.

Como delegado del CEN del PRD para la elección de Guerrero, Guadalupe Acosta Naranjo se ha estado codeando con personajes polémicos que han abonado a que el partido esté en crisis. En su cuenta de Twitter, Acosta Naranjo publicó una selfie con el exgobernador Ángel Aguirre Rivero en la que ambos aparecen muy sonrientes, como si nada les preocupara. “Con mi compañero Ángel Aguirre, platicando de la problemática nacional y aclarando rumores mal intencionados”, publicó Acosta Naranjo.

En la red social también aparece una fotografía muy sonriente de Acosta Naranjo a bordo de una motocicleta propiedad de Félix Salgado Macedonio. Tal parece que nada preocupa a Guadalupe Acosta Naranjo que anda feliz en la campaña de Guerrero, mientras que Beatriz Mojica, la candidata, trabaja todos los días para intentar mejorar la imagen del PRD y ganar la elección en (lo que era) un bastión clave del perredismo nacional.

Que se arroje la primera piedra

Lorenzo Córdova, consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, está en medio de un huracán mediático porque fue grabado en franca burla de un representante indígena. Aunque el tema dará mucho de qué hablar, muchos de sus detractores en realidad se pondrán unas mordidas de lengua que provocarán sangre, porque se refieren igualito o peor con indígenas o con subalternos.

Pero lo grave no es la hipocresía con la que será tratado el Consejero, quien en lugar de reconocer que cometió un error, lo primero que hizo fue denunciar a la PGR que lo espiaban. Lo realmente grave va a ser si esta grabación es una advertencia contra el titular del INE para influir en su trabajo en las próximas elecciones.

Por las suspicacias que puede generar la grabación ponga atención, señor lector, en los próximos días. Esto apenas empieza.

Y lo que falta

El Senado de la República lleva un sobreprecio del 146 por ciento a cuatro años de que la obra fue entregada y que digan lo que digan, no pueden dar por terminada, ni la darán pronto.

Curioso fue que ayer senadores y funcionarios de la Cámara Alta salieron a dar la cara para decir que por lo menos llevan gastados más de mil millones que no estaban contemplados en la obra original. Pero eso no es todo, resulta que la obra todavía tiene inconsistencias en 21 rubros. Lo interesante es que no se habla de implicados, responsables, castigos o penalidades.