No hay imagen disponible

La Laguna ¿el estado 33?

Un grupo de ciudadanos en Durango y Coahuila buscan su propia soberanía política y económica.

El proyecto para establecer el Estado de La Laguna (ELLA) es impulsado por una docena de capitanes de la industria en esta región, que en la última década ha padecido el embate de la inseguridad y una parálisis en su desarrollo.

Los empresarios que promueven la nueva entidad demandan al Gobierno de la República el reconocimiento de esta zona y las aportaciones federales que le corresponden, dado su peso en la balanza de la economía nacional.

La entonces conocida Provincia de La Laguna fue separada e integrada a dos jurisdicciones diferentes
"No es inteligente que La Laguna esté dividida, es una sola, la población está entretejida, tenemos una misma identidad"
Federico Sáenz Negrete
“Que me metan a la cárcel 15 años si yo me lanzo de candidato, ni de gobernador, ni de alcalde, ni de diputado del Congreso local”
Pedro Luis Martín Bringas Empresario
https://www.youtube.com/watch?v=yKncn2WtjVU

Un grupo de ciudadanos en Durango y Coahuila buscan su propia soberanía política y económica.

El proyecto para establecer el Estado de La Laguna (ELLA) es impulsado por una docena de capitanes de la industria en esta región, que en la última década ha padecido el embate de la inseguridad y una parálisis en su desarrollo.

Los empresarios que promueven la nueva entidad demandan al Gobierno de la República el reconocimiento de esta zona y las aportaciones federales que le corresponden, dado su peso en la balanza de la economía nacional.

Hasta la fecha, el proyecto parece haber prendido en los ánimos de los laguneros, pues la asociación civil que impulsa ELLA ha recabado en un año más de 385 mil firmas, con el objetivo de separarse de sus dos estados vecinos.

El plan es conformar una nueva entidad con 20 municipios: 14 pertenecientes a Durango y seis más a Coahuila, que comparten una identidad, una historia y una dinámica económica propia.

La crisis en la que está sumida la Comarca Lagunera, apuntan los impulsores del proyecto, se debe en gran medida a las decisiones tomadas en los centros políticos en Durango capital y Saltillo, así como por el desdén del Gobierno Federal.

Y es que, aseguran, en las últimas cinco décadas, del total de impuestos enviados a la Federación, solamente se regresan a la región un 12 por ciento en aportaciones federales, mientras que lo justo sería un 35 por ciento.

Si el plan se vuelve una realidad, los integrantes del movimiento calculan un presupuesto anual de egresos para la nueva entidad de 26 mil millones de pesos.

El empresario Pedro Luis Martín Bringas, accionista de Grupo Soriana y el promotor más visible de la campaña “Vota por ELLA, no por ellos”, dice que esta falta de estímulos han sumido en la miseria a la región.

El presidente de la organización señala que, aunado al problema de la criminalidad que aún azota a La Laguna, esto inhibe a los sectores productivos y a la inversión pública en infraestructura.

“El problema principal de La Laguna es el desempleo, la economía, la pobreza, el no tener aspiración. No hay forma de poner un negocio”, indica Martín Bringas, uno de los principales críticos del gobernador de Coahuila, Rubén Moreira.

Los promotores de ELLA han fijado como meta reunir 500 mil firmas antes de los próximos comicios, para demostrar a los legisladores federales que son legítimas sus demandas de soberanía económica y política.

“Somos más fuertes que los autodefensas, a nosotros los autodefensas nos hacen los mandados, porque nosotros, primero, no utilizamos la fuerza para que se nos sea escuchado. Segundo, nosotros tenemos la razón, somos el mandante”.

Federico Sáenz Negrete, otro de los impulsores de ELLA, estima que si se recaba ese número, se habrían recolectado más firmas que votos en la Comarca Lagunera por todos los candidatos a la Presidencia de la República en las elecciones de 2012.

El empresarios automotriz menciona que los cerca de 1.6 millones ciudadanos que conforman la región se encuentran en la indefensión política, pues los gobernantes locales se preocupan más por sus proyectos personales.

“Somos un cuerpo, que la mitad la ve un doctor que está en un hospital de Saltillo, a 240 kilómetros al oriente. La otra mitad la ve un doctor que está en un hospital de Durango capital, 220 kilómetros al poniente”, comenta el también poeta.

“Ambos mandan a sus enfermeros, toman muestras de sangre, hacen las análisis en su lugar, lo promedian con el resto del hospital de otros estados y nos mandan la receta. Antes no nos hemos muerto”.

Sáenz Negrete recuerda que La Laguna pasó de ser un centro de vanguardia industrial y tecnológica, a una zona caracterizada por la debacle económica.

El ‘desecho del norte’

La Laguna pasó de ser en las últimas décadas de una región generadora de riqueza a ostentar una condición de marginalidad en el proyecto nacional.

Al menos así concuerdan los integrantes de ELLA, quienes aseguran que esta disidencia política no es reciente, sino producto de administraciones anteriores que han desdeñado la importancia de la Comarca Lagunera.

Problemas de infraestructura, servicios públicos, vialidad y fuga de talentos son las que enlistan como las principales causas del estancamiento económico.

“Somos el desecho del norte, cuando fuimos la vanguardia nacional toda la vida”, afirma, sin ambages, Federico Sáenz Negrete.

“La República mexicana ha perdido a una de las zonas que le enviaba más recursos del país y ahorita le envía puros problemas”.

De acuerdo con cálculos de ELLA, 3 de cada 4 universitarios graduados de instituciones académicas en la región se van de La Laguna para encontrar trabajo en otros centros económicos, como Monterrey, Guadalajara y la Ciudad de México.

Esto se suma a los problemas de contaminación en los mantos acuíferos, y la improductividad ganadera y agrícola en las zonas rurales de la comarca.

“Con el tiempo se fue decayendo, de tal manera que nos encontramos en una situación muy difícil”, rememora Pedro Carlos Delgado López, director del Parque Industrial “Las Américas”.

El empresario lagunero dice que no sólo es necesaria una corresponsabilidad fiscal en las aportaciones que percibe la región, sino también una atención urgente al tema de la inseguridad por parte de las autoridades federales.

“Las capitales no han volteado a La Laguna, nos tienen abandonados en varias formas. Realmente nosotros como empresarios nos ha pegado muy duro el hecho de que no haya inversiones aquí, que no se generen empleos y, por otro lado, la inseguridad”.

Para Delgado López, la única solución al problema es la creación de la entidad número 33 del país.

“Con eso podemos nosotros volver a tener el sistema de producción y generación de empleos y riqueza que teníamos anteriormente”, menciona.

El comerciante David Eugenio Sada Salinas asegura que este fenómeno ha inhibido la producción, a pesar de los esfuerzos gubernamentales.

“Tengo conocidos que ya no una sola vez, sino dos veces, los han extorsionado y pues prácticamente su capital se mermó”, se lamenta.

“Los industriales de La Laguna están desanimados porque no hay protección y no hay estímulos para la inversión”.

Sada Salinas calcula que 4 de cada 10 personas habían sufrido de secuestros.

¿Y cómo le va a hacer ELLA?

JJuntar las firmas es el primer paso de todo un proceso que se necesita para que el Estado de la Laguna sea una realidad.

El primer obstáculo es lograr el consenso político en las esferas más altas del Gobierno Federal.

El movimiento se fijó como meta recaudar 500 mil firmas de ciudadanos, respaldadas con sus credenciales de elector, para presentar la iniciativa al presidente Enrique Peña Nieto.

De ahí, el jefe del Ejecutivo federal tendría que turnar la propuesta al Congreso de la Unión, donde sólo podría pasar por mayoría simple.

Sin embargo, si los estados de Durango y Coahuila protestan, la iniciativa tendría que conseguir las dos terceras partes de los Congresos locales del país.

En caso de conseguir esta aprobación, se nombraría un gobernador interino que convocaría a elecciones para diputados locales y al próximo mandatario estatal, y sólo se respetarían las administraciones de los 20 ayuntamientos.

Pedro Luis Martín Bringas menciona que ya se tiene un plan si la iniciativa llega a esta parte final del proceso, que incluye una nueva constitución local, códigos, y figuras como plebiscito y revocación de mandato.

El empresario ha entablado pláticas con distintos los legisladores federales para discutir la propuesta de la creación de la nueva entidad.

No buscará gubernatura

La disidencia política de ELLA ha causado escozor en los centros políticos de Durango y Coahuila, en especial con el gobernador de esta última entidad, Rubén Moreira, quien públicamente ha cuestionado la legitimidad del proyecto.

En ese sentido, Pedro Luis Martín Bringas afirma que si el Estado de la Laguna se convierte en una realidad, él ni los demás integrantes del movimiento ciudadano que encabeza buscarán puestos de elección popular.

“Yo lo único que quiero es llevarme la satisfacción de que muchísima gente que me ha dado el privilegio de pedirme que los represente me paguen todos los días de una manera impresionante con su confianza”, dice el accionista de Grupo Soriana.

“Que me metan a la cárcel 15 años si yo me lanzo de candidato, ni de gobernador, ni de alcalde, ni de diputado del Congreso local”.

Que me metan a la cárcel 15 años si yo me lanzo de candidato, ni de gobernador, ni de alcalde, ni de diputado del Congreso local”

Una separación ‘artificial’

Los entusiastas de ELLA dicen que el territorio de La Laguna fue dividido de forma artificial.

El mapa de la región fue creado hace 420 años y, desde entonces, se creó una interacción económica, demográfica, social y política entre los habitantes de los 20 municipios que conforman la región.

El territorio de La Laguna se delineó en 1594, cuando el rey Felipe II concedió la jurisdicción de las tierras a los jesuitas para evangelizar y colonizar.

La entonces conocida Provincia de La Laguna, sin embargo, fue separada e integrada a dos jurisdicciones diferentes por Carlos III, al final de su reinado.

En 1785, este rey nombró al gobernador de la Nueva Vizcaya, Felipe Díaz de Ortega, en el que separaba a La laguna entre Coahuila y Durango.

Así, una parte se quedó en la Nueva Vizcaya y la otra fue añadida a la Provincia de Coahuila.

Federico Sáenz Negrete advierte que en aquel año los laguneros fueron “divididos artificialmente”, porque se separó una misma cultura en dos.

“No es inteligente que La Laguna esté dividida, es una sola, la población está entretejida, tenemos una misma identidad.

“(El gobernador Rubén Moreira) tiene la oportunidad histórica de apoyar un movimiento legítimo, real, justo, de reivindicación de una zona que es de gente noble, luchona, trabajadora, que merece un espacio”, concluye. 

Candidatos del PAN a diputados locales se pronunciaron ayer a favor de la creación del Estado de La Laguna. Los albiazules explicaron que se percataron de un clamor de la gente en ese sentido, pues la región se encuentra en el abandono.