Nick Drake: un genio atormentado

Hay músicos que tienen el talento y la virtuosidad para convertirse en estrellas, pero el éxito comercial y la fama se les niega y entonces su obra queda limitada a un selecto grupo de músicos y críticos. Es la historia de Nick Drake: un músico para músicos.

Hay músicos que tienen el talento y la virtuosidad para convertirse en estrellas, pero el éxito comercial y la fama se les niega y entonces su obra queda limitada a un selecto grupo de músicos y críticos. Es la historia de Nick Drake: un músico para músicos. Una figura de culto. 
 
En su fugaz vida (murió en 1974 a los 26 años por una sobredosis de pastillas antidepresivas) publicó tres discos que pasaron sin pena ni gloria en la industria musical y que juntos no habrán vendido más de 10 mil copias.
 
“Todos me dicen que soy genial, pero no tengo dinero. ¿Por qué?”, se preguntaba este chico inglés delgado, melena larga, semblante melancólico y sombrío.
 
Las canciones de Nick Drake estaban compuestas de una sensibilidad única y cargadas de una nostalgia notable. Eran piezas íntimas. Eso sí: depresivas y tristes.
 
Era un cantautor raro, atormentado, pero un artista adelantado a su tiempo. 
 
Se negaba a actuar en vivo y a dar entrevistas, lo que sin duda influyó para que no fuera conocido como otras figuras del folk de ese entonces como Bob Dylan, Neil Young y Leonard Cohen.
 
Es cierto que el éxito se le negó en vida a Nick Drake, pero hoy es considerado un genio y uno de los músicos más influyentes de la historia. Sin las canciones de Nick Drake, hoy seguramente no existiria como los conocemos a The Cure, The Black Crowes y Blur.
 
No hay en You Tube presentaciones en vivo de Nick Drake. Como decíamos: No le gustaba los directos. Lo que hay son grabaciones raras de actuaciones que tuvo como, por ejemplo, en el programa de radio de John Peel para la BBC, recopilada luego en un disco maravilloso. Hay un documental “A Skin Too Few: The Days of Nick Drake”, donde participa su hermana, productores y amigos y es dirigido por el holandés Jeroen Berkvens.
 
Condenado al olvido, Nick Drake ha logrado mucho tiempo después de su muerte, ser reconocido por el mundo de la música. Sus seguidores acuden por montones a la casa de sus padres en Warwickshire, en Inglaterra, donde murió y está enterrado.
 
En “Fruit Tree”, incluida en su álbum debut, el joven Nick escribe: “La fama es sólo un árbol frutal, muy insonoro, que no puede florecer hasta que su tallo esté en la tierra, tantos hombres de fama, nunca pueden encontrar el camino, antes de que el tiempo haya volado, lejos de su día de muerte”.
 
El destino de Nick estaba marcado.

Te puede interesar
CAVERNíCOLA Los hijos de Avándaro Todo por un “Chingue su madre el que no cante…” emitido por el cantante de “Peace & Love”, Ricardo Ochoa, que retumbó por la transmisión de Radio Juventud, fue lo que provocó que todo lo que oliera a Avándaro fuera perseguido
CAVERNíCOLA El día en que la anarquía se tomó la TV
Tony Wilson, el legendario conductor de la televisión británica irrumpió la calma de los hogares europeos en agosto de 1976 al presentar a un cuarteto que nada tenía que ver con los trajeados Beatles de Liverpool.
 
Con una seria similtud a Alex DeLarge -el personaje de La Naranja Mecánica- Wilson junto a otros 41 ingleses fueron al auditorio de la primera presentación de los Sex Pistols en "So it goes", el show televisivo de las mas vanguardistas propuestas musicales de mediados de la década de los setenta.
 
La transmisión comienza