Espionaje azulgrana

Cuidar la forma en que sus jugadores  se divertían en las noches era una obsesión de Pep Guardiola cuando dirigía al Barcelona, a tal punto de que el técnico mandó espiarlos. 

Al menos así lo asegura el portal ElConfidencial.com, al publicar que la agencia de detectives Método 3 se dedicó a seguir a algunos futbolistas del equipo azulgrana.

Al parecer, el estratega habría pedido que se investigara con detenimiento a Gerard Piqué, luego de que el defensa iniciara su romance con la cantante Shakira.

Los informes que se le presentaban a Guardiola detallaban hasta las copas que el jugador se tomaba. 

Tantos días se investigó al jugador que en un momento los investigadores fueron descubiertos. El representante de Piqué denunció ante el club que estaba siendo seguido por desconocidos. 

Para calmar el tema y que no se destapara el espionaje, Xavier Martorell, director de Seguridad del equipo, le dijo al representante del futbolista que, tras las pesquisas que había hecho, los que lo seguían eran de la prensa del corazón y le prometió que controlaría el tema y que se ocuparía de su seguridad.

ElConfidencial.com, añadió que Guardiola estaba obsesionado con que los jugadores no salieran de juerga porque después no rendían en el césped, y tanto él como Manel Estiarte, director de Relaciones Externas del Barça, no dudaban en pedir la colaboración de detectives cuando tenían sospechas de que algún jugador andaba en malos pasos.

Las informaciones publicadas aseguran que durante el tiempo que Pep estuvo al frente del primer equipo entabló una cordial relación con Martorell, quien ejecutaba la voluntad de Guardiola de estar informado en todo momento.

El técnico solicitaba los servicios de los detectives incluso en altas horas de la noche, debido a que se enteraba de que cualquiera de los futbolistas organizaba una salida con amigos y pedía que se montaran controles inmediatamente.